Cerca de 1,980 elementos del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional arribaron a Michoacán este lunes, dando inicio a la “Operación Paricutín” y cumpliendo así con el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia. Este despliegue, anunciado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, busca confrontar la escalada de inseguridad, especialmente el homicidio doloso y la extorsión en zonas clave de la entidad.
La estrategia federal: 1,980 elementos desplegados en Michoacán
El refuerzo de seguridad federal que llegó a Michoacán forma parte integral de la denominada “Operación Paricutín”. Según las autoridades militares, Michoacán ha sido catalogada como una prioridad absoluta para el gobierno federal, justificando la movilización masiva de tropas.
El Comandante de la 21 Zona Militar y General de Brigada de Estado Mayor, Juan Bravo Velázquez, detalló la magnitud de la operación y el proceso de distribución de las fuerzas:
> “Van a llegar mil 980 elementos entre Ejército y Guardia Nacional los cuales serán distribuidos en los lugares de mayor inseguridad obviamente, pero cubriendo todo el estado. Vienen llegando por partes, unos llegarán acá otro llegarán en la 43 zona militar en Apatzingán, ya están destinados pero el día de hoy deberán llegar todos los refuerzos.”
El despliegue tiene como objetivo principal:
- Disminuir los índices de inseguridad en la entidad.
- Combatir el delito de la extorsión.
- Acabar con los grupos delincuenciales.
- Implementar acciones contra el homicidio doloso.
Arribo a la 21 Zona Militar
El proceso de concentración de tropas se inició puntualmente el lunes. A las 2:00 de la tarde, cerca de 300 oficiales del Ejército Mexicano, provenientes de distintas entidades del país, arribaron a la 21 Zona Militar con sede en Morelia.
Una vez concentrados en este punto, los oficiales partirán hacia las regiones previamente destinadas para comenzar con la implementación de las acciones operativas. El General Bravo Velázquez enfatizó que todos los refuerzos deben estar en el estado antes de finalizar el día de hoy.
Las zonas críticas y el compromiso con derechos humanos
Aunque el mando militar expuso que la totalidad de los municipios son prioridad dentro del Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, se identificaron áreas que presentan condiciones de riesgo especiales y requieren atención inmediata.
Las localidades a las que se dará especial prioridad son:
- Uruapan (que presenta “condiciones especiales”).
- Morelia.
- Zamora.
- Apatzingán.
Frente a las tropas que se movilizarán hacia otras regiones del estado, el comandante de la 21 Zona Militar recordó a los militares su compromiso con la misión de disminuir los índices de inseguridad.
Objetivos de alta prioridad y el mensaje de confianza
El General Bravo Velázquez reconoció que el gobierno federal y estatal sí tienen objetivos delincuenciales prioritarios para su detención. Sin embargo, en un ejercicio de cautela estratégica, el mando militar evitó revelar la cifra exacta de los “generadores de violencia” que se buscará detener a través de este despliegue.
A pesar de las condiciones de riesgo, el General Bravo Velázquez hizo un llamado directo a la población michoacana, comprometiendo que los refuerzos de seguridad federal actuarán siempre bajo el respeto a la legalidad y a los Derechos Humanos de los ciudadanos:
> “Confíen en nosotros, venimos en beneficio de la ciudadanía michoacana. Nosotros siempre vemos por el respeto a los derechos humanos en todas las actividades que realizamos y lo vamos a seguir haciendo en el estado.”
El arribo de casi dos mil elementos a Michoacán es una clara señal de la intensidad con la que la administración de Claudia Sheinbaum ha decidido enfrentar el crimen organizado en una de las regiones más golpeadas del país. La ciudadanía espera que este compromiso, respaldado por la promesa de respeto a los Derechos Humanos y la contundencia operativa, logre finalmente fracturar las estructuras criminales que han mantenido a la región bajo la extorsión y la violencia homicida. El éxito de la Operación Paricutín será una prueba de fuego para la nueva estrategia federal de seguridad.




