El caso de Fernando Dellarciprete ha conmocionado a la sociedad por la brutal manera en que quitó la vida a su esposa, Rocío Villarreal, y a sus dos hijos. Las investigaciones apuntan a que un trastorno paranoide, caracterizado por desconfianza, habría sido clave en sus acciones.

La fiscalía investiga el siniestro caso

Natalia Ramos, la fiscal que lleva el caso del multihomicidio de Rocío y sus dos hijos, informó que Fernando Dellarciprete, de 42 años, estaba bajo tratamiento psiquiátrico.

Según la fiscal, fue diagnosticado con trastorno paranoide, que se define como un patrón de desconfianza persistente.

Cómo ocurrió el brutal ataque

La autopsia reveló que Rocío Villarreal fue atacada con saña por su exesposo, Fernando Dellarciprete.

El crimen contra Rocío Villarreal

Además de un cuchillo, utilizó un cable para asfixiar a Rocío durante la madrugada, dejándola dentro de su hogar.

El destino de los hijos

Dellarciprete llevó a sus hijos de 6 y 9 años en su camioneta hasta la autopista nacional 228, a 10 kilómetros de la casa. Intentó estrellarse con una moto, pero al fallar, condujo hacia una zanja donde ahogó a los niños.

Finalmente, intentó suicidarse lanzándose a la carretera ante un camión de carga pesada. Antes había pedido insistentemente una pistola a testigos cercanos.

¿qué es el trastorno paranoide?

El texto proporciona una definición basada en la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

El trastorno de personalidad paranoica (PPD) es una condición mental. La persona presenta un patrón prolongado de desconfianza y recelo hacia los demás.

Aunque no es un trastorno psicótico completo como la esquizofrenia, el texto señala que es más frecuente en hombres.

La aparente normalidad en redes

El texto destaca que Fernando Dellarciprete parecía actuar de manera normal.

Lo plasmaba en sus redes sociales, donde compartió una imagen familiar sobre el tema de los estudios Ghibli que se hizo viral.

En esas fotos, Fernando aparecía detrás, sonriente junto a su familia. Esto no hacía sospechar problemas en su hogar, mostrando viajes, alegrías y unión familiar. Sin embargo, detrás de esas imágenes se escondía la desconfianza y los recelos.

Un caso trágico que expone la complejidad de los trastornos mentales y cómo pueden contrastar con la imagen pública, según la información disponible.