Valentín Elizalde no fue asesinado por su música. Su hermano revela una versión inédita que cambia por completo lo que creíamos saber.
El día que el Gallo de Oro dejó de cantar
El 25 de noviembre de 2006, miles coreaban sus canciones en Reynosa. Horas después, Valentín Elizalde fue acribillado. ¿Qué pasó realmente? Su hermano Francisco acaba de romper el silencio y lo que dijo puede cambiar para siempre cómo entendemos el crimen que sacudió a México y al regional mexicano. Una historia de celos, poder y traición.
La noche que marcó el fin: ¿cómo murió Valentín Elizalde?
El último concierto
Valentín Elizalde, conocido como El Gallo de Oro, ofrecía un show multitudinario en el Palenque de la Expo-Feria de Reynosa. Fue ovacionado. No imaginaba que sería su despedida.
El ataque mortal
Minutos después de abandonar el recinto, un comando armado interceptó la camioneta donde viajaba. Con él iban su chofer, su representante y su primo, Tano Elizalde.
Los sicarios abrieron fuego con rifles de alto calibre. Más de 20 disparos acabaron con la vida del cantante, su chofer y su representante. Tano fue el único sobreviviente.
La versión oficial: provocación narco por una canción
Durante años, la narrativa dominante fue clara: Valentín murió por cantar A mis enemigos, supuestamente dedicada al líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán.
¿Un error de interpretación?
Según esta versión, cantar esa canción en Reynosa territorio controlado por el Cártel del Golfo y Los Zetas fue visto como una afrenta directa. Sin embargo, Francisco Elizalde lo niega rotundamente:
“No fue cierto. No es cierto. Y aparte la canción era con un nombre, pues no una canción que dijera, ‘Ah, trae el nombre de fulano o mangano’. Eso está descartado”, afirmó.
La nueva verdad: celos, amor prohibido y crimen organizado
Una relación peligrosa
Francisco Elizalde plantea una hipótesis demoledora: el móvil del crimen habría sido una relación amorosa. Valentín habría sostenido un vínculo sentimental con una mujer casada, relacionada con un alto perfil del narcotráfico.
“Puede ser. O sea, sí apunta todo que sería celos por una mujer. Pudo haber sido eso”, reveló Francisco.
No era un rumor: la familia sabía
Aunque estas sospechas circulaban en privado, es la primera vez que alguien de la familia lo dice públicamente. Incluso, afirman conocer la identidad de los asesinos:
“Desde hace mucho se sabe. Ya unos están en la cárcel, otros están ya fallecidos”.
Tano Elizalde: el primo señalado
¿Víctima o cómplice?
Tano, primo de Valentín, sobrevivió al ataque. Pero no tardaron en surgir dudas sobre su papel en los hechos. Fue quien insistió en que el cantante actuará en Reynosa, a pesar de las advertencias sobre riesgos.
Relación con la viuda
Lo que encendió aún más la polémica fue su posterior relación con la viuda de Valentín. Para muchos, una traición imperdonable.
“Mi primo no cuenta una sola versión, no sabe cuál es la real al final. Yo siento que lo que él plasmó ahí no es lo real”, declaró Francisco, en referencia al documental producido por Tano.
Valentina Elizalde: la hija que alzó la voz
Un mensaje cargado de dolor
A los 3 años perdió a su padre. Hoy, con 21, Valentina alza la voz con firmeza. En el aniversario número 18 del crimen, escribió en redes:
“Él no falleció, tú lo mataste. Me quitaste la oportunidad de tener un papá”.
Acompañó sus palabras con fotos de su niñez y un collar con forma de gallo, símbolo del amor eterno a su padre.
Una carrera con propósito
Valentina busca su lugar en la música regional. Aclara que no busca fama, sino mantener vivo el legado de su padre:
“El dinero no llena el vacío de su ausencia. Hablo de él para seguir recordándolo, no para ‘colgarme’ de su fama”.
Francisco Elizalde: entre la música y la memoria
Presente en la industria
Francisco ha seguido una carrera propia en la música. Ha colaborado como compositor con nombres como Alejandro Fernández, Pedro Fernández y Yuridia.
Sin poder intervenir
Sobre las decisiones patrimoniales de sus sobrinas, afirma que no puede intervenir legalmente, aunque le gustaría.
“Al ser mayores de edad, yo ya no puedo meterme en eso, aunque me gustaría hacerlo”.
¿Y ahora qué? La herida sigue abierta
Casi dos décadas después, el caso de Valentín Elizalde sigue despertando emociones, dudas y teorías. La versión oficial se tambalea con las nuevas revelaciones. Lo que parecía un crimen narco, hoy toma forma de tragedia pasional.
¿Habrá justicia?
Aunque algunos responsables están muertos o encarcelados, no ha habido un cierre judicial claro. La familia vive con una verdad a medias.
“Desde hace mucho se sabe quiénes fueron”, insiste Francisco.
El legado que nadie pudo callar
La muerte de Valentín Elizalde fue una pérdida brutal para la música mexicana. Pero más allá del ídolo, estaba el ser humano, el padre, el hermano, el hijo.
Hoy, su historia se reescribe. No como mártir de una canción, sino como víctima de un sistema donde el amor y el crimen se cruzan mortalmente.
¿Podrá algún día conocerse toda la verdad?
