La creadora de contenido Marianne Gonzaga ha vuelto a encender las redes sociales, pero no por su contenido habitual. Tras cinco meses de internamiento y su liberación por el delito de “lesiones calificadas”, la polémica se centra ahora en un nuevo giro personal: la recuperación de la custodia de su bebé, Emma. Este caso reabre el debate sobre la justicia y la influencia digital.
El anuncio en redes y la controversia sobre la custodia
Marianne Gonzaga, cuya presencia en plataformas digitales sigue generando controversia, compartió recientemente en su cuenta de TikTok (@mariannerc) un metraje crucial. En él, la creadora de contenido se mostró en compañía de su hija, Emma, afirmando categóricamente que la custodia le fue otorgada “para siempre”.
El video, que parece haber sido grabado en las oficinas de lo que algunos usuarios identificaron como un tribunal, llevaba una descripción emotiva: “Después de un tiempo tan largo te tengo conmigo ya para siempre, eres lo más bonito que me dio la vida te amo emmita”.
El anuncio ha desatado una ola de comentarios encontrados entre el público que sigue el caso. Si bien su regreso a las redes sociales es aplaudido por sus fans, quienes buscan defenderla de cualquiera que declare en su contra, otras opiniones cuestionan la veracidad de la custodia permanente o sugieren que podrían tratarse únicamente de visitas supervisadas.
@mariannerc Después de un tiempo tan largo te tengo conmigo ya para siempre 💕✨ eres lo más bonito que me dio la vida te amo emmita
♬ son original – Pearlfection
- Opiniones de usuarios respecto al reencuentro:
- “Solo vean como la mira, la toca y le sonríe, ese angelito sabe que ella es mamá y siempre será mamá.”
- “Juntas en las oficinas de un tribunal, qué pena.”
- “Si, es una bebé y necesita estar cerca de su mami, pero sabiendo que Marianne no se arrepiente de lo que hizo, la niña sí corre peligro en sus brazos.”
Cronología del ataque a Valentina Gilabert y el proceso legal
La polémica que rodea a Gonzaga está intrínsecamente ligada al grave delito que cometió a principios de 2025, el cual la llevó a enfrentar al sistema de justicia.
El incidente en Álvaro Obregón
El 5 de febrero de 2025, Marianne Gonzaga, quien en ese momento tenía 17 años, fue detenida por agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC CDMX). La detención ocurrió luego de que la joven apuñalara a la modelo Valentina Gilabert en un complejo habitacional ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón.
De acuerdo con la información oficial, el suceso tuvo lugar después de que Marianne viajara desde Cancún para encontrarse con su expareja, identificado como José Said (padre de su hija), y presuntamente irrumpiera para confrontar a Valentina Gilabert, quien mantenía una relación con él.
El ataque se caracterizó por la brutalidad, ya que Gilabert fue herida de gravedad por múltiples puñaladas con arma blanca. Posteriormente, las autoridades vincularon a proceso a Gonzaga por el delito de lesiones calificadas.
Las consecuencias del ataque
La agresión tuvo lugar la noche del 4 de febrero de 2025. Las investigaciones detallaron que Gonzaga atacó a Valentina con un cuchillo, causándole entre 12 y 15 puñaladas en áreas críticas como el cuello, el tórax y las manos. Estas heridas pusieron en riesgo la vida de la modelo, por lo que fue trasladada de emergencia a un hospital, sometida a cirugía y reportada en estado de coma antes de lograr la estabilidad.
Tras la detención por la SSC, Marianne Gonzaga fue presentada ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX). El Ministerio Público la vinculó a proceso por el delito de lesiones calificadas que ponen en riesgo la vida. Dado que en ese momento tenía 17 años, el caso fue canalizado al sistema de justicia especializado para adolescentes.
El acuerdo legal y la liberación
La creadora de contenido estuvo cinco meses internada en un centro de reintegración juvenil. Su liberación se concretó gracias a un acuerdo legal alcanzado con la familia de Valentina Gilabert. Dicho acuerdo contempló medidas de reparación del daño y, crucialmente, seguimiento psicológico obligatorio.
Desde su salida, la influencer ha manifestado su intención de retomar tanto su vida personal como profesional. Afirma buscar enfocarse en su hija, Emma, y en reconstruir su futuro, a pesar de la indignación que sus declaraciones recientes han provocado en una parte de la opinión pública.
El regreso de Marianne Gonzaga a la vida pública y la aparente celeridad en la recuperación de la custodia de su hija, después de enfrentar cargos por un delito tan grave como las lesiones calificadas, expone la complejidad del sistema de justicia juvenil y la capacidad de resiliencia mediática. ¿La condena social superará el acuerdo legal que permitió su libertad?




