La tarde del viernes 15 de agosto de 2025, un impresionante doble arcoíris cautivó a los habitantes de la Ciudad de México y Campeche. Las imágenes y videos, compartidos por usuarios con El Heraldo de México, se viralizaron en plataformas digitales, dejando una hermosa postal. Ambos fenómenos se manifestaron simultáneamente, alrededor de las 18:00 horas, en distintos puntos de la República Mexicana.
Dos fenómenos en puntos opuestos
El primer arcoíris, compartido por la usuaria Liz Serrano, se formó en todo el Valle de México. Pudo ser percibido incluso desde las alcaldías de la capital y municipios del Estado de México, principalmente Huixquilucan, ofreciendo una vista panorámica del fenómeno.
Mientras tanto, el segundo arcoíris, captado por el usuario Miguel Espinosa, fue registrado desde el sur del país, específicamente en San Francisco, Campeche. Ambas apariciones simultáneas generaron asombro y admiración en todo el territorio.
El impacto en redes sociales
Las impactantes postales del doble arcoíris generaron diversos comentarios en plataformas como Twitter y Facebook. Las reacciones abarcaron desde explicaciones científicas del fenómeno hasta expresiones que lo veían desde la poesía, evidenciando la diversidad de la respuesta pública ante el suceso.
Un tuit, compartido por la usuaria @OrquiTear el 16 de agosto de 2025, reflejó la interpretación poética:
> “-¿Y es bonita? – En medio de la tormenta y el sol… Ella es el arcoíris.”
Otro testimonio visual fue compartido por el usuario @EnriqueVargasdV, también el 16 de agosto de 2025:
> “Les comparto el arcoíris visto desde la parte alta de Vaco Criadero, en la comunidad de Allende en Huixquilucan.”
¿Qué es un doble arcoíris? La ciencia detrás del fenómeno
Aunque pueda sonar algo evidente, la formación de un doble arcoíris se explica por un fenómeno de doble reflexión. Este segundo arco de colores se forma como resultado de que la luz, en algunas gotas de agua, se refleja dos veces en su interior. La luz entra refractándose y rebota dos veces contra las paredes interiores de la gota de agua antes de salir refractándose definitivamente, creando así el arco secundario.
Este espectáculo natural, una danza de luz y agua, nos recuerda la capacidad de la naturaleza para ofrecer momentos de asombro y belleza. Mientras la ciencia lo explica como doble reflexión, la poesía lo inmortaliza, dejando una huella de encanto en quienes lo presencian. ¿Estuvo usted entre los afortunados?
