A partir del primer minuto del 17 de octubre, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) dejó de existir, marcando el fin de una era en la regulación de las telecomunicaciones en México. Tras más de una década de funciones, el IFT se despidió deseando éxito a las entidades que tomarán su relevo.
El fin de una era para el IFT
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) concluyó sus funciones como parte de una serie de reestructuras en los órganos autónomos del gobierno federal. A través de sus redes sociales, el ente regulador recordó su labor durante más de una década, destacando su papel en evitar monopolios y fomentar la competencia en el sector de las telecomunicaciones.
- Independencia y Compromiso: El IFT subraya que trabajó con firmeza, independencia y compromiso.
- Beneficios al País: Promovió el desarrollo eficiente de las telecomunicaciones y la radiodifusión, protegiendo los derechos de audiencias y usuarios.
En sus palabras de despedida, el organismo autónomo expresó su orgullo por lo construido y agradeció a la sociedad por la confianza depositada.
El legado del IFT y el futuro de la regulación
Las funciones del IFT serán asumidas por dos nuevas oficinas y otras dependencias gubernamentales.
Nuevas entidades reguladoras
- Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones: Una de las entidades de nueva creación.
- Agencia Antimonopolios: La segunda oficina creada para reemplazar al IFT.
- Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT): Asumirá parte de las funciones.
- Comisión Reguladora de Telecomunicaciones: También participará en la regulación del sector.
El IFT deseó éxito a estas entidades, esperando que continúen garantizando la competencia económica en México y regulando los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión de manera eficiente.
¿Podrán las nuevas agencias mantener el equilibrio y la competencia que el IFT buscó durante su existencia?