Teuchitlán, Jalisco. Una comunidad conmocionada. Su máxima autoridad municipal enfrenta cargos graves. El caso del Rancho Izaguirre ha desatado un escándalo judicial que pone en jaque la confianza pública. El alcalde de Teuchitlán está tras las rejas, acusado de formar parte de una red criminal.
El escándalo que sacude a Teuchitlán
El nombre del alcalde bajo la lupa federal
José Ascensión “N”, también conocido como “Chon”, pasó de encabezar actos públicos a ocupar una celda en el Penal de Puente Grande. El Ministerio Público lo señala por delincuencia organizada y desaparición forzada, cargos que estremecen por su gravedad y por el contexto en el que emergen.
El Rancho Izaguirre: mucho más que un predio rural
Según la Fiscalía General de la República (FGR), el Rancho Izaguirre era una base de operaciones criminales, donde se realizaban reclutamientos y entrenamientos ilegales por parte de un grupo del crimen organizado. La conexión del inmueble con el alcalde ha sido motivo de investigación profunda.
El desarrollo del juicio: una audiencia de 10 horas
La jornada que decidió su futuro inmediato
El 1 de mayo, en los juzgados federales del Penal de Puente Grande, la jueza Ana Beatriz Aguilar Jiménez determinó la vinculación a proceso tras una audiencia maratónica de más de diez horas. El proceso judicial incluyó testimonios, evidencias documentales y protestas ciudadanas.
Familiares y simpatizantes: apoyo y tensión en la calle
Desde las primeras horas del día, decenas de personas se agolparon a las afueras del penal con pancartas y consignas: “¡Liberen a Chon!”, exclamaban. El apoyo social al funcionario contrastaba con el peso de las imputaciones legales.
La defensa del alcalde: estrategias y contradicciones
Argumentos de inocencia
- Presentación de entrevistas a policías municipales que niegan vínculos criminales.
- Testimonio del chofer particular, quien aseguró nunca haberlo llevado al Rancho Izaguirre.
- Negación de reuniones con criminales en bares.
- Se mencionó incluso que el alcalde “es muy miedoso” como argumento de improbabilidad de participación activa.
El silencio del acusado
José Ascensión “N” decidió no declarar, dejando todo en manos de su equipo legal. Esta estrategia, aunque legalmente válida, fue interpretada por algunos como un intento de evadir contradicciones.
Las pruebas del Ministerio Público
Un expediente contundente
El Ministerio Público presentó 100 pruebas documentales y testimoniales, entre ellas:
- Geolocalizaciones telefónicas
- Testigos protegidos
- Fotografías y videos del Rancho Izaguirre
- Transcripciones de llamadas
La jueza consideró que los argumentos de la defensa no eran convincentes ante la cantidad y calidad de las evidencias.
El trasfondo del Rancho Izaguirre
Historia y ubicación
El Rancho Izaguirre se encuentra en una zona rural de Teuchitlán, Jalisco, relativamente alejada del casco urbano. En el pasado, fue conocido por actividades agropecuarias, pero desde hace algunos años, se reportaban movimientos inusuales y acceso restringido.
Actividades criminales reportadas
Las investigaciones revelan que el predio era un centro de adoctrinamiento y entrenamiento paramilitar. Se encontraron:
- Galpones con blancos de tiro
- Ropa táctica
- Manuales de adiestramiento
- Restos óseos de posibles víctimas
Consecuencias legales y políticas
Medidas cautelares y próximos pasos
La jueza dictaminó que el alcalde permanecerá en prisión preventiva durante al menos cuatro meses, mientras se realizan las investigaciones complementarias.
Durante ese periodo:
- Se podrán ampliar declaraciones
- Se incorporarán nuevas pruebas
- Se determinará si el caso va a juicio oral
Crisis institucional en Teuchitlán
La ausencia del presidente municipal genera una vacante de poder que impacta la gobernabilidad. Se ha convocado a cabildo extraordinario para nombrar a un encargado del despacho.
Reacciones sociales y políticas
Sociedad dividida
Mientras una parte de la población defiende la inocencia del alcalde, otros exigen una investigación profunda y sin concesiones. El escándalo ha polarizado a la comunidad.
Impacto en la opinión pública
Medios estatales y nacionales han dado cobertura destacada al caso, lo cual ha dañado la imagen del gobierno local y generado preocupación ciudadana por los presuntos nexos criminales de sus autoridades.
Entre la justicia y la incertidumbre
El caso del Rancho Izaguirre pone sobre la mesa una cruda realidad: los tentáculos del crimen organizado pueden alcanzar los niveles más altos del poder local. ¿Es este un hecho aislado o la punta de un iceberg más profundo? La sociedad espera respuestas, pero también exige transparencia y justicia.