Vidulfo Rosales Sierra, el reconocido abogado y defensor de derechos humanos, ha anunciado este jueves su renuncia al Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y a la representación legal de las familias de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa. Este movimiento marca un giro significativo en su trayectoria profesional.
Una renuncia tras veinticuatro años de compromiso
La noticia de su partida se dio a conocer a través de un comunicado titulado “En otras trincheras de lucha”. En este, Rosales Sierra expresó: “Con profundo pesar les informo que dejo de colaborar en el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan. Agradezco a Abel Barrera por permitirme defender a los que menos tienen y por caminar al lado de nuestros pueblos a lo largo de veinticuatro años”.
De la primera línea de la lucha social a la Suprema Corte
El abogado aseguró en el texto que se retira de la primera línea de la lucha social “con la frente en alto, con la seguridad de haber puesto un grano de arena en la pelea de nuestros pueblos”. Agregó que seguirá con la exigencia de que los derechos humanos sean una realidad, a fin de que los pueblos indígenas y afromexicanos tengan una vida digna y no sean tratados como personas de segunda.
Te puede interesar: Alejandro
Nuevo rol en la SCJN
Se informó que Rosales se integrará al equipo legal del nuevo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Hugo Aguilar Ortiz. De hecho, un día antes de que confirmara su renuncia, Rosales apareció en una fotografía de la cuarta reunión de ministros electos de la Suprema Corte. En dicho encuentro, se detalló que se revisaron los proyectos de acuerdos generales para conformar un marco jurídico que permita impartir justicia pronta, expedita y accesible.
Una década dedicada al caso Ayotzinapa
Te puede interesar: Genaro Lozano, el analista que representará a México en Italia
Vidulfo Rosales representó a los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa desde hace más de diez años, asumiendo su defensa legal específicamente a partir del 2014. Fue un persistente activista, utilizando incluso sus redes sociales para buscar la verdad de las víctimas. Un ejemplo de su compromiso se vio el 21 de junio del año 2017, cuando el abogado publicó en su cuenta de X (anteriormente Twitter), @VidulfoRosales: “Se cumplen mil días sin verdad ni justicia por Ayotzinapa”.
Su renuncia se produce a casi un mes de que se cumplan once años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en Iguala. Este cambio de trinchera plantea nuevas expectativas sobre su influencia en el ámbito judicial y la continuidad de su lucha por los derechos humanos en México.