Una confrontación en el Zócalo capitalino resultó en diez personas lesionadas, específicamente ocho servidores públicos y dos ciudadanos. Este incidente se desencadenó durante un desalojo de comerciantes llevado a cabo por el gobierno local para garantizar la seguridad en el primer cuadro de la ciudad. Las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para deslindar responsabilidades.
Riña en el Zócalo capitalino deja diez lesionados tras desalojo
Al menos ocho servidores públicos y dos comerciantes resultaron lesionados durante una riña registrada en el Zócalo capitalino. Este saldo se produjo luego de que trabajadores del gobierno local desalojaran a vendedores en el primer cuadro de la ciudad.
La Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México denunció agresiones directas en contra del personal de la Subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública. Estos hechos ocurrieron en la plancha del Zócalo, tras realizar recorridos preventivos para inhibir la instalación de comercio no autorizado.
La estrategia preventiva para el Grito de la Independencia
De acuerdo con la dependencia, la estrategia implementada tenía el objetivo primordial de evitar la acumulación de puestos. Este esfuerzo busca asegurar el sitio donde tradicionalmente se llevará a cabo el festejo del Grito de la Independencia.
La Secretaría de Gobierno destacó que la instalación de puestos semifijos en la zona constituye un riesgo significativo para la movilidad de la ciudadanía. Las estructuras y mercancías, indicó, pueden provocar tropiezos y accidentes, comprometiendo la seguridad pública.
Detonante de la violencia y el seguimiento judicial
La Secretaría de Gobierno detalló que, ante la negativa de algunos comerciantes a retirarse del espacio público, comenzaron a agredir al personal capitalino. Esta situación derivó en ocho trabajadores con lesiones menores, quienes afortunadamente no requirieron traslado hospitalario.
Adicionalmente, dos ciudadanos más fueron trasladados para su valoración médica debido a las lesiones sufridas durante el altercado. Los servidores públicos, por su parte, continúan con las labores de supervisión en el Zócalo para garantizar que el espacio permanezca libre y seguro.
Derivado de estas agresiones, las autoridades han iniciado las investigaciones correspondientes. El objetivo es presentar las denuncias pertinentes y deslindar responsabilidades sobre los hechos ocurridos.
Este incidente subraya la tensión inherente entre la regulación del espacio público y la actividad comercial informal, especialmente en vísperas de eventos de gran concurrencia como el Grito de la Independencia. La resolución de este conflicto y el establecimiento de responsabilidades serán cruciales para la convivencia en el corazón de la capital.
