Una intrincada red de conflictos legales y luchas internas ha sacudido a la franquicia de Miss Universo México, llevando a la detención temporal de su director en Tailandia. Este suceso, revelado por la exdirectora Martha Cristiana, expone las consecuencias de un patrocinio ilícito y profundiza la crisis diplomática en el certamen Miss Universo 2025.
La detención y el patrocinio ilegal
El escándalo se hizo público el 10 de noviembre de 2025, cuando la exdirectora de Miss Universo México, Martha Cristiana, confirmó en un programa en vivo que Jorge Figueroa, el actual director de la franquicia, había sido detenido temporalmente en Bangkok, Tailandia. Esta acción se llevó a cabo en medio de la controversia que envuelve al certamen de Miss Universo 2025.
La detención de Figueroa y otros miembros del equipo mexicano fue desencadenada por una denuncia presentada por Nawat Itsaragrisil, el director tailandés del certamen y presidente de Miss Grand International. Itsaragrisil alegó que la organización mexicana se había asociado con una empresa de apuestas en línea como patrocinadora. Esta actividad se considera estrictamente ilegal en Tailandia.
Aunque los reportes oficiales indican que Jorge Figueroa fue liberado horas después de la intervención policial, el incidente escaló la disputa legal y diplomática entre las partes. Hasta el momento, el propio Jorge Figueroa no ha ofrecido su versión de los hechos.
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La postura de Martha Cristiana y la lucha interna
Martha Cristiana señaló directamente a Figueroa como la fuente de esta crisis. Según su análisis, el actual director es culpable de haber generado la tensión y el conflicto con la dirección tailandesa. La exdirectora afirmó que la detención fue una consecuencia directa de las acciones tomadas por Figueroa.
La organización mexicana, por su parte, ha tomado una postura de confrontación. Liderada por Raúl Rocha Cantú, el equipo planea emprender acciones legales contra Itsaragrisil a raíz de esta cadena de sucesos.
El contexto del conflicto: maltrato y represalia
La detención del equipo de producción, compuesto principalmente por trabajadores mexicanos, fue la culminación de una intensa disputa que llevaba meses gestándose entre la Organización Miss Universo (MUO) y Nawat Itsaragrisil, su socio local tailandés.
La crisis original comenzó cuando Itsaragrisil insultó públicamente a la concursante mexicana Fátima Bosch, lo que provocó una reacción inmediata de la organización de Miss Universo, que restringió su participación y amenazó con acciones legales.
Los insultos directos a Fátima Bosch
La interacción entre el empresario Itsaragrisil y la reina de belleza mexicana, Fátima Bosch, fue grabada y se difundió en redes sociales (mencionada en la cuenta @arre_df). Los hechos ocurrieron de la siguiente manera:
- Nawat Itsaragrisil preguntó: “¿Vas a seguir nuestras indicaciones o no? ¿Puedes trabajar para promover Tailandia o no? ¿Sí o no?”
- Fátima Bosch respondió: “Sí, por supuesto, sí”.
- Itsaragrisil replicó con un insulto contundente: “Es un cabeza hueca para la reina. Si sigues las órdenes de tu director nacional, eres una cabeza hueca”.
Fue en ese momento cuando Fátima Bosch puso un alto a la interacción.
La MUO y la franquicia mexicana condenaron de inmediato estos actos, anunciando que emprenderían acciones legales contra Itsaragrisil por el maltrato hacia la delegada.
La denuncia de Itsaragrisil como aparente represalia
Aunque las acciones legales anunciadas por la organización mexicana contra Itsaragrisil por el caso Bosch no se han hecho públicas hasta el momento, se especula que los problemas legales continuarán escalando tras el certamen de belleza.
En un aparente acto de represalia por las amenazas de demanda, Itsaragrisil presentó la denuncia policial centrada en el patrocinio del concurso por parte de la empresa de juegos de azar en línea. Esta promoción, al ser ilegal en Tailandia, resultó en la intervención policial y la detención del personal de producción, el cual era mayoritariamente mexicano y fue liberado horas después.
Este conflicto en Miss Universo 2025 revela una profunda lucha de poder donde las disputas personales escalaron hasta convertirse en incidentes con repercusiones legales y diplomáticas, usando la ley tailandesa sobre juegos de azar como arma de defensa. La determinación de la organización mexicana de demandar a Nawat Itsaragrisil, incluso después de la detención de Figueroa, sugiere que este pulso está lejos de resolverse. ¿Hasta dónde llegará esta guerra legal que amenaza con desmantelar la estructura de la franquicia en México?
