En una noche donde el talento del boxeo mexicano brilló con contundencia, Rafael “El Divino” Espinoza defendió su corona de la Organización Mundial de Boxeo (OMB). Sin embargo, la velada no estuvo exenta de controversia, especialmente por la apretada y abucheada victoria de Lindolfo Delgado, manteniendo la racha de los invictos del boxeo mexicano invictos.
Rafael Espinoza demolió a Khegai para defender su título
El tapatío Rafael Espinoza logró la cuarta defensa del título pluma de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) al obligar al retador ucraniano Arnold Khegai a no salir al onceavo round.
La pelea demostró la superioridad del campeón, quien aprovechó de manera metódica:
- Su gran distancia.
- Su fortaleza física.
- Un constante volumen de golpeo.
“El Divino” comenzó a “machacar poco a poco” a su rival. Los daños acumulados en el rostro de Khegai fueron determinantes para que él y su equipo tomaran la decisión de retirarse. El ucraniano presentaba un exceso de sangre en la nariz, un corte en el rabillo del ojo izquierdo y una notable hinchazón en la frente.
El aún invicto Espinoza, quien fue acompañado a esta cita por el excampeón mexicano Marco Antonio Barrera, elevó su foja profesional. Esta fue su pelea número 28 como profesional, de las cuales 24 han finalizado antes del límite. Aunque Khegai intentó nivelar el combate con potentes volados de derecha, el upper del campeón y sus golpes rectos lo mantuvieron a raya en todo momento.
Con este triunfo, el tapatío manifestó su deseo de poder unificar las coronas de la división, apuntando a convertirse en campeón indiscutido.
La polémica victoria de Lindolfo Delgado: abucheos en la cartelera
En lo que se configuró como la pelea más polémica de la noche, el exolímpico mexicano Lindolfo Delgado mantuvo su calidad de invicto tras una apretada decisión que generó el descontento del público.
Delgado se midió a Gabriel Gollaz Valenzuela en un duelo que terminó por la vía de los doce asaltos. La tensión fue máxima en el último round, cuando Lindolfo visitó la lona. Sin embargo, se levantó y logró terminar toda la vía.
El resultado se dictaminó mediante una decisión dividida y extremadamente apretada:
- Dos tarjetas registraron 114-113 a favor de Delgado.
- El tercer juez vio un 114-113, pero para Gollaz Valenzuela.
Con este polémico resultado, el púgil regio mejoró su foja profesional a 24-0 con 16 nocauts, pero la decisión de los jueces le valió los abucheos de los asistentes al evento.
Los invictos que se consolidan: Vargas y Torrez Jr.
La cartelera también sirvió como plataforma para la consolidación de dos promesas que mantienen el cero en su columna de derrotas, incluyendo la obtención de un título regional.
El invicto Emiliano Vargas se impuso por decisión unánime a Jonathan Montrel. Tras doce asaltos, Vargas se hizo con el título latino wélter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) con tarjetas contundentes que reflejaron su dominio: 110-89, 99-90 y 99-90.
Por su parte, el peleador de peso completo, Richard Torrez Jr., extendió su racha ganadora a 14-0, con 12 nocauts. Torrez despachó al checo Tomas Salek en tan solo un episodio. El olímpico de sangre mexicana conectó un gancho al rostro de Salek que provocó la fractura de nariz del europeo, deteniendo las acciones a los 2 minutos y 45 segundos de la pelea.
El boxeo mexicano ha demostrado una profunda base de talento invicto, desde el campeón Rafael Espinoza hasta los prospectos Richard Torrez Jr. y Lindolfo Delgado. Sin embargo, el margen de las victorias, especialmente la de Delgado, pone el reflector sobre la necesidad de no solo ganar, sino de convencer. ¿Serán capaces estos púgiles de mantener su récord perfecto cuando la calidad de la oposición escale, o veremos pronto una fractura en su legado?
