La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo está evaluando la posibilidad de sostener su primer encuentro oficial con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en Washington D.C. El marco de esta potencial reunión Sheinbaum Trump sería el sorteo final del Mundial de Fútbol 2026. La decisión, clave para la diplomacia binacional y que marca la antesala de un nuevo ciclo geopolítico, se tomará en las próximas horas.
El dilema de la agenda internacional y la confirmación de la cita
Desde la Mañanera del Pueblo, la presidenta Sheinbaum Pardo indicó que está analizando las circunstancias en torno a una visita a Estados Unidos programada para el 5 de diciembre. La decisión final sobre su asistencia al sorteo del mundial será tomada entre el martes y miércoles.
Confirmó que cuenta con la invitación oficial de la FIFA para asistir al sorteo en Washington. Sin embargo, para concretar la visita, y la posible reunión con el mandatario estadounidense, falta por definir si es posible coordinar las agendas de los líderes de la región.
> “Entonces, pues depende de si van a ir el Primer Ministro [de Canadá, Mark Carney], si va el presidente Trump, todo eso nos lo tiene que confirmar para poder confirmar nuestra asistencia y ya veríamos si es el caso de la posibilidad de una reunión, también de acuerdo con la agenda del presidente Trump”, afirmó la presidenta.
Al ser cuestionada directamente sobre si una de estas circunstancias incluye buscar una reunión bilateral con el presidente Trump, la presidenta aclaró: “Todavía no está definido, no hemos hablado, no he hablado recientemente con el presidente Trump”.
El estado de la relación bilateral: comercio y seguridad
La presidenta Sheinbaum Pardo destacó que, a pesar de la incertidumbre sobre el encuentro, existe una buena relación y coordinación con Estados Unidos.
La última vez que la mandataria conversó con Donald Trump fue hacia finales de octubre, fecha en la que se cumplía el “famoso plazo de los tres meses”. Según detalló Sheinbaum Pardo, en esa ocasión acordaron que seguirían platicando y que no había problema en ese sentido.
Avances en barreras no arancelarias y agenda de seguridad
Actualmente, uno de los puntos centrales de la coordinación bilateral es el combate a las barreras comerciales.
- Barreras arancelarias: Se trabaja para eliminar las barreras no arancelarias.
- 54 barreras: La presidenta indicó que se están cerrando las famosas 54 barreras no arancelarias, un tema que, según sus palabras, “ya prácticamente está resuelto”.
En materia de seguridad, detalló que después del 5 de diciembre se realizará en México la segunda reunión entre las áreas de seguridad de ambos países, con el objetivo de darle seguimiento al entendimiento bilateral en la materia.
Proyección económica 2026 y el blindaje del T-MEC
A pesar de que el Banco de México recortó su expectativa de crecimiento para 2025 en su conjunto, pasando de 0.6% a 0.3%, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo manifestó que el panorama económico será favorable.
“Vamos a cerrar bien el año y el próximo año pues va a ser todavía mejor”, señaló la presidenta durante su conferencia de prensa.
Certidumbre por la ratificación del T-MEC
La mandataria destacó que la ratificación del tratado comercial con Estados Unidos y Canadá, el T-MEC, durante el próximo año dará mayor certidumbre a la economía.
Además de la seguridad jurídica, la presidenta enfatizó que el país registrará:
- Mayor obra pública, especialmente en carreteras.
- Mucha más inversión pública, lo cual da impulso a la inversión privada.
Sheinbaum Pardo subrayó que tiene la certeza de que el tratado continuará, con sus adecuaciones que serán revisadas por la propia revisión legal, “que así está pactado desde que se firmó”. Esto, reiteró, dará aún más certidumbre al panorama económico nacional.
La estabilidad de la relación binacional se juega en varios frentes simultáneos: desde el cierre de 54 barreras comerciales hasta el diálogo continuo en seguridad. Que una posible reunión de alto nivel entre la presidenta Claudia Sheinbaum y Donald Trump dependa de la asistencia al sorteo de un evento deportivo subraya la naturaleza pragmática y a veces inusual de la diplomacia contemporánea. ¿Podrá la antesala del Mundial 2026 servir como un catalizador para afianzar los acuerdos clave antes de que la agenda económica y de seguridad se complique en el próximo ciclo?




