La noche del viernes 28 de noviembre, una alarma de seguridad paralizó el tránsito aéreo en Estados Unidos. La Administración Federal de Aviación (FAA) confirmó la amenaza de bomba Filadelfia que obligó a suspender vuelos y evacuar el Aeropuerto Internacional de la ciudad. Este incidente se suma a una reciente ola de alertas de seguridad.
Crisis aérea: Aeropuerto Internacional de Filadelfia en alerta máxima
La Administración Federal de Aviación (FAA) emitió un informe crucial la noche de este viernes 28 de noviembre desde sus canales oficiales, confirmando la suspensión de las operaciones de vuelo en el Aeropuerto Internacional de Filadelfia (PHL). La medida drástica fue una respuesta inmediata a una amenaza de bomba, que simultáneamente generó evacuaciones preventivas en la terminal.
Restricciones aéreas y respuesta de seguridad
El incidente no solo afectó a los aviones en tierra, sino que las restricciones aéreas fueron aplicadas a diversas rutas clave. Los vuelos detenidos procedían de las siguientes ciudades:
- Washington D. C.
- Nueva York.
- Boston.
- Cleveland.
Tras la alerta, la zona afectada fue inmediatamente acordonada para que personal de seguridad respondiera a la emergencia. Hasta el momento no se tienen informes de personas heridas, un dato clave mientras continúan las labores de inspección.
La postura oficial de la FAA y la probabilidad de extensión
La incertidumbre sobre la duración del cierre motivó un pronunciamiento oficial de la autoridad federal. La FAA detalló sus evaluaciones sobre la probabilidad de continuidad del bloqueo operativo, señalando una perspectiva de riesgo medio.
Según se lee en la misiva de la FAA: “Según evaluaciones de la FAA, la probabilidad de que la parada en tierra se extienda se considera media, estimada entre 30% y 60%”. Se espera que en las próximas horas se amplíe la información oficial sobre el caso, manteniendo a miles de viajeros en suspenso.
La recurrencia de las amenazas en Estados Unidos
Este evento en el Aeropuerto Internacional de Filadelfia no es un hecho aislado. El incidente se produce tras amenazas de bomba similares en otros aeropuertos estadounidenses a principios de este mes, que, afortunadamente, se resolvieron sin incidentes graves.
La repetición de estos eventos subraya una creciente preocupación por la seguridad aérea. Un caso reciente ocurrió a principios de noviembre, cuando las operaciones en el Aeropuerto Nacional Reagan-Washington se suspendieron brevemente. Dicha suspensión fue motivada por una amenaza de bomba que fue dirigida, en esa ocasión, a un avión de United Airlines. La información sobre las salidas al Aeropuerto Internacional de Filadelfia puestas a tierra debido a la amenaza de bomba ha sido ampliamente compartida por diversos medios, citando a la FAA.
La rápida respuesta institucional de la FAA y las autoridades locales mitigó el riesgo, pero la recurrencia de estas amenazas de bomba en Estados Unidos durante noviembre de 2025 exige una revisión profunda de los protocolos de seguridad. ¿Es este un patrón de ataques coordinados o simplemente una preocupante serie de incidentes aislados que evidencian vulnerabilidades críticas en la infraestructura aérea?
