Una elección general mantiene a Honduras en vilo, sumida en una inédita situación de “empate técnico” que ha paralizado el conteo de votos. Mientras el centrista Salvador Nasralla supera por la mínima al conservador Nasry Asfura, la controversia se agudiza por las denuncias de fraude y la notoria interferencia de Donald Trump en el proceso.
El escrutinio en suspenso: empate técnico en las elecciones Honduras 2025
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras se vio forzado a reiniciar el recuento de los votos de las elecciones presidenciales este martes 2 de diciembre de 2025. La decisión se tomó un día después de que la autoridad electoral anunciara un “empate técnico” entre los dos candidatos principales y tuviera que interrumpir el escrutinio debido a problemas técnicos.
Con poco más del 61% de las actas escrutadas, la diferencia entre ambos candidatos es tan reducida que se encuentra dentro del margen de error estadístico, justificando la declaración de empate técnico por parte del CNE.
Los resultados preliminares, que mantienen al país en vilo, son los siguientes:
- Salvador Nasralla (Centrista, afamado expresentador de televisión): Alcanza 788,004 votos, lo que representa el 39,94%.
- Nasry Asfura (Conservador, exalcalde de Tegucigalpa): Suma 785,411 votos, equivalente al 39,81%.
En la tercera posición se encuentra la oficialista Rixi Moncada, exministra de Defensa y delfín de la presidenta Xiomara Castro, con el 19,19% de los sufragios.
Denuncias de fraude y la pugna por la ventaja
La jornada electoral del domingo, en la que los hondureños también eligieron a los 128 integrantes del Parlamento nacional, 20 representantes al Parlamento Centroamericano y las autoridades de los 298 municipios, transcurrió en paz. Sin embargo, el ambiente previo y posterior al cierre de urnas estuvo marcado por la desconfianza.
Semanas antes de los comicios, tanto Libre, el partido oficialista, como la oposición, denunciaron posibles fraudes, lo que elevó los temores sobre la transparencia del proceso. Una vez reiniciado el conteo:
- Los dos candidatos que lideran la contienda aseguran tener la ventaja, según sus datos internos.
- Rixi Moncada denunció públicamente una presunta “inflación de actas” en favor del Partido Nacional, en el que milita Nasry Asfura.
El lunes, mientras el CNE pedía calma, Salvador Nasralla publicó en sus redes sociales una proyección de votos que lo situaba como vencedor de los comicios. Posteriormente, el centrista aclaró su mensaje, indicando que solo estaban “proyectando los resultados que van a ingresar al CNE en las próximas horas”, y no declarándose ganador. Este es el cuarto intento de Nasralla por alcanzar la presidencia; en 2022, se integró a la fórmula de la propuesta de izquierdas de Xiomara Castro como vicepresidente.
Por su parte, el conservador Nasry Asfura, quien hizo campaña con el lema “Papi a la orden”, también pidió paciencia a sus correligionarios, asegurando que los resultados favorecían a su partido. Esta es la segunda ocasión en la que el exalcalde de Tegucigalpa se postula al máximo cargo público en Honduras.
El apoyo de Trump y el fantasma de la injerencia externa
La campaña de Nasry Asfura recibió un inusual y explícito respaldo del presidente estadounidense Donald Trump, un factor que ha añadido polémica a la contienda, especialmente después de que encuestas previas situaran a Asfura en tercer lugar.
En los días previos a las elecciones, Donald Trump utilizó su red social Truth Social para:
- Dar explícitamente su apoyo a Asfura en varios mensajes.
- Anunciar el indulto al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, quien cumplía una condena de 45 años en Estados Unidos por narcotráfico y que, en el pasado, fue líder del Partido Nacional.
- Amenazar con recortar la ayuda financiera al país centroamericano si Asfura no resultaba ganador.
La tarde del lunes, la retórica se intensificó. Trump hizo referencia al proceso de recuento de votos, publicando un mensaje en el que advertía: “Parece que Honduras está tratando de cambiar los resultados de su elección presidencial. ¡Si lo hacen, habrá infierno que pagar!”. El mandatario emitió estas declaraciones sin aportar pruebas que respaldaran su afirmación de manipulación.
¿Qué pasa si el margen de votos persiste?
Dado que en Honduras no existe segunda vuelta electoral, el ganador será aquel que obtenga la mayoría de votos, sin importar cuán mínimo sea el margen, una vez que el conteo finalice.
Según la Ley hondureña, la autoridad electoral debe:
- Concluir el conteo y anunciar al ganador a más tardar 30 días calendario después de los comicios.
- Publicar el anuncio oficial al día siguiente en el diario oficial La Gaceta.
Un escenario improbable, pero contemplado por la legislación, es que se produzca un empate numérico exacto. Si esto ocurre, las boletas se volverían a contar en un escrutinio especial. Si tras este nuevo conteo la igualdad persiste, la ley establece que se debe convocar a una nueva elección dentro de los 20 días calendario siguientes a la declaración del empate, realizándose los comicios únicamente entre los candidatos que hayan empatado.
El nuevo gobierno que surja de esta tensa elección tendrá que responder a las expectativas de una nación donde más del 60% de los hogares vive en condiciones de pobreza y donde la realidad está marcada por la violencia política, la corrupción y el crimen organizado.
