En Yucatán, la esperanza vuelve a pastar en los campos. Con una inversión histórica, la ganadería yucateca inicia su renacimiento, liderada por un gobernador que conoce el terreno.
El renacer de una actividad histórica en Yucatán
La ganadería ha sido durante siglos un pilar de la economía rural yucateca. Sin embargo, décadas de abandono, falta de apoyos y crisis climáticas redujeron su esplendor. Hoy, el Gobierno de Joaquín Díaz Mena lanza un programa integral para rescatar el hato ganadero y posicionar nuevamente a Yucatán como referente nacional.
“Estamos aquí para hacer justicia a la actividad ganadera”, expresó el mandatario durante el evento.
Con este plan, se busca aumentar el número de cabezas de ganado de 350 mil a 500 mil en tres años, con la meta de alcanzar el millón de ejemplares al cierre del sexenio.
Apoyos directos: 8.9 millones para más de 340 productores
Distribución equitativa y sin intermediarios
Los apoyos entregados forman parte de un presupuesto de más de 53 millones de pesos, contemplado para 2025. En esta primera fase, 340 productores de 61 municipios ya fueron beneficiados con cheques por un total de 8.9 millones de pesos.
Entre los apoyos destacan:
- 334 sementales bovinos con subsidios de $25,000 cada uno
- 80 sementales ovinos con subsidios de $8,000 cada uno
“Gracias por cumplir, Gobernador. Hoy lo vemos reflejado en nuestros bolsillos”, celebró Manuel Medina Castro, de la Asociación de Criadores de Ganado de Registro.
Mejoramiento genético: innovación desde Texas
Tecnología reproductiva al servicio del campo
El plan no solo se basa en dinero, sino en tecnología. Con apoyo de una empresa de Texas, llegarán 100 mil pajillas de semen sexado Brahman, que permitirán implementar un programa de inseminación artificial a gran escala en ranchos locales.
Meta 2025: 100 mil inseminaciones
Objetivo final: mejorar la calidad genética del hato yucateco
Este enfoque biotecnológico busca que la producción ganadera sea más rentable, sostenible y heredable para las futuras generaciones.
Ganadería rentable y heredable
Durante el evento, Díaz Mena reafirmó que su gobierno está del lado de los pequeños productores, aquellos que hacen del campo su vida y herencia. La promesa es convertir la ganadería en una actividad rentable, digna y orgullosa.
“Vamos a lograr que Yucatán vuelva a ser una potencia ganadera en el sureste”, declaró.
El plan también contempla:
- Pagos justos a criadores locales
- Apoyo a jóvenes y mujeres rurales
Fortalecimiento del tejido productivo en el oriente del estado
El resurgimiento de la ganadería yucateca no es solo una meta económica: es una reivindicación cultural y social. Si el plan avanza como está proyectado, el campo yucateco podría convertirse nuevamente en motor de desarrollo regional. ¿Será este el comienzo de una nueva era dorada para la ganadería del sureste?