El adiós a un pontífice: comienza el ritual final
Más de 128,000 fieles han llegado a Roma para despedirse del papa Francisco. Esta noche, su ataúd será sellado. ¿Qué sigue después?
El cierre del ataúd: un acto cargado de simbolismo
Este viernes por la noche, el Vaticano vivirá uno de los momentos más solemnes de su historia reciente: el cierre del ataúd del papa Francisco. Este acto no solo marca el final de una vida, sino el inicio de una serie de rituales milenarios cargados de simbolismo, tradición y precisión litúrgica.
El encargado de cerrar el féretro será el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio de Cardenales. Según el padre Jonathan Arellano, secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal para la Pastoral Litúrgica, la clausura está programada para las 8:00 de la noche, hora de Roma.
“La Plaza de San Pedro cerrará desde las 5:00 p.m. y la Basílica a las 7:00 p.m., para preparar todo lo necesario”, explicó Arellano en entrevista con El Heraldo Radio.
La noche en vela en la Basílica: 48 horas de despedida
Una vigilia sin precedentes
Durante los días previos, la Basílica de San Pedro permaneció abierta hasta la madrugada para permitir la despedida de los fieles. En total, más de 128,000 peregrinos han desfilado frente al cuerpo del pontífice.
Un flujo continuo de devoción
- El miércoles 23 y jueves 24 de abril, los accesos se mantuvieron abiertos hasta las 5:30 de la mañana.
- Miles llegaron desde todas partes del mundo: América Latina, África, Asia y Europa.
- Se vivió una atmósfera de respeto profundo, llanto silencioso y oración continua.
“Nunca habíamos visto algo así desde el funeral de Juan Pablo II”, comentó un guardia suizo.
El traslado del féretro: tradición y solemnidad
¿Quién mueve el ataúd papal?
El cuerpo será trasladado la mañana del sábado por los sediarios pontificios, una institución con siglos de antigüedad. Estos hombres, que en tiempos antiguos cargaban la “silla gestatoria”, ahora tienen un papel ceremonial clave: llevar el féretro del papa hasta la Plaza de San Pedro.
El Sacratum como escenario central
El ataúd será colocado en el Sacratum, un área elevada y sagrada de la Basílica, desde donde se presidirá la ceremonia fúnebre. Este espacio representa simbólicamente la conexión entre lo humano y lo divino, lo terrenal y lo eterno.
La misa fúnebre: un rito para la historia
¿Qué es una misa de cuerpo presente?
En el contexto vaticano, se trata de una misa solemne donde el cuerpo del difunto está presente en el recinto. En México, este ritual es conocido como “misa de cuerpo presente”. La ceremonia será presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, como máximo representante del Colegio Cardenalicio.
“La misa será el sábado 26 de abril, a las 10:00 de la mañana, hora de Roma. Se espera una participación masiva”, adelantó el padre Arellano.
Asistencia de líderes mundiales
Se prevé la presencia de:
- Más de 50 jefes de Estado
- 100 delegaciones diplomáticas
- Altas autoridades de distintas religiones y credos
Será una ceremonia ecuménica, abierta, pero profundamente arraigada en el protocolo católico.
¿Qué pasará con el cuerpo tras la misa?
Los tres ataúdes del Papa
El cuerpo del pontífice será colocado en tres ataúdes sucesivos, como marca la tradición:
- Ataúd de ciprés: directo contacto con el cuerpo. Representa humildad.
- Ataúd de zinc: sellado hermético para conservación.
- Ataúd de roble: protección exterior y símbolo de la solidez de la fe.
Cada uno se sella con cera papal y documentos que narran la vida del pontífice, incluidas monedas y medallas conmemorativas.
¿Dónde será enterrado?
Aunque el Vaticano aún no ha confirmado el lugar exacto del entierro, existen dos posibilidades:
- Criptas vaticanas, donde reposan varios papas, incluidos Juan Pablo II y Pablo VI.
- Basílica de San Juan de Letrán, como alternativa litúrgica.
El poder simbólico de un funeral papal
Un momento de unidad global
El fallecimiento de un papa no solo es un hecho religioso, sino también un evento político y cultural global. Millones seguirán la ceremonia en vivo a través de plataformas digitales, canales internacionales y redes sociales.
Un mensaje para el futuro
El legado de Francisco, el primer papa latinoamericano, quedará marcado por su énfasis en la pobreza, la migración, la ecología y la reforma eclesial. Su funeral es, en cierto modo, la culminación de su mensaje de humildad y apertura.
¿Y después del adiós?
El cierre del ataúd de Francisco no es solo el final de una vida, sino el inicio de una nueva etapa para la Iglesia Católica. En los próximos días, comenzarán las discusiones sobre su legado, el impacto de su papado y, eventualmente, la elección de su sucesor si se confirma su fallecimiento oficial.
¿Estamos listos para el nuevo rumbo de la Iglesia en un mundo que ya no es el mismo que cuando él asumió el trono de San Pedro?