El Sapo del CJNG operó con total impunidad en Teuchitlán por omisiones de Sedena, FGR y Guardia Nacional, según revela Anabel Hernández.
El rostro invisible del terror: Cómo el Estado ignoró al Sapo del CJNG
Gonzalo Mendoza Gaytán, alias El Sapo, no vivía oculto. Su nombre figuraba en reportes militares, investigaciones judiciales y alertas internacionales. Sin embargo, durante más de una década, este operador clave del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) construyó en Teuchitlán un imperio criminal con respaldo institucional. Anabel Hernández lo revela con crudeza en su podcast Narcosistema.
El expediente olvidado: Cómo las autoridades sabían todo sobre El Sapo
Un objetivo prioritario desde 2017
En noviembre de 2017, Sedena elaboró un documento clasificado en el que identificaba a Gonzalo Mendoza Gaytán como objetivo prioritario del crimen organizado. Con tan solo 29 años, operaba en Puerto Vallarta bajo el monitoreo de la 41 Zona Militar.
Ese mismo expediente, según Anabel Hernández, incluía:
- Nombre completo y apodos
- Fotografía reciente
- Domicilios vinculados
- Red de familiares y cómplices
- Ubicación de operaciones en Jalisco y Nayarit
🚨 #AnabelHernández revela negligencias que permitieron a “El Sapo”, del CJNG, operar en Teuchitlán https://t.co/ZKN0PGFD38 pic.twitter.com/tJTfMGqa6Y
— Infobae México (@infobaemexico) March 27, 2025
El silencio de la Fiscalía
Desde 2010, la extinta PGR y, posteriormente, la FGR abrieron al menos 12 carpetas de investigación contra Mendoza Gaytán. Los delitos:
- Narcotráfico
- Delincuencia organizada
- Homicidio
- Secuestro y desaparición forzada
Ninguna derivó en su captura. Hernández sostiene que esto no fue una omisión casual, sino una estrategia sostenida de protección institucional.
El Rancho Izaguirre: Centro de reclutamiento, tortura y exterminio
Una fábrica de muerte en Teuchitlán
Entre 2018 y 2025, el Rancho Izaguirre, ubicado en el municipio jalisciense de Teuchitlán, operó como un centro clandestino del CJNG. Allí se reclutaba forzadamente a personas, se les entrenaba como sicarios, y si no eran útiles, eran asesinadas.
“Era un centro de esclavitud moderna”, asegura una fuente de inteligencia federal citada en el podcast.
Según los testimonios recabados:
- Las víctimas eran engañadas con falsas ofertas de empleo
- Eran despojadas de sus pertenencias
- Se les torturaba física y psicológicamente
- Si no eran útiles, se les asesinaba y cremaba
Quema de cuerpos con técnicas de ocultamiento
Hernández detalla que los cuerpos eran tratados químicamente para minimizar olores y humo, evitando así la detección por autoridades o pobladores cercanos.
No fue un hecho aislado. El Rancho Izaguirre era parte de una red de centros de exterminio en:
- Zapopan
- Guadalajara
- Tlajomulco
- Tlaquepaque
- Lagos de Moreno
¿Protección militar? Las acusaciones que apuntan a Sedena y Guardia Nacional
¿Quién protegía al Sapo?
El nombre de Antonio Oseguera Cervantes, alias Tony Montana y hermano de El Mencho, aparece como jefe directo de El Sapo, según los informes militares citados.
La periodista sugiere que la Sedena protegía a Mendoza Gaytán mediante pagos regulares y omisiones deliberadas. Incluso menciona que en agosto de 2024, cuatro elementos del 41 Batallón de la Guardia Nacional fueron detenidos con más de un millón de pesos en efectivo.
“No fue burocracia, fue corrupción”, afirma Anabel Hernández.
Funcionarios locales implicados
En los documentos filtrados también se menciona a funcionarios públicos locales y ex militares presuntamente involucrados en la protección del CJNG:
- Un ex delegado en Puerto Vallarta
- Un policía municipal de San Sebastián del Oeste
- Un exdirector de seguridad pública de Ameca
Ninguno ha sido procesado, investigado públicamente ni separado del cargo.
El papel del gobierno de AMLO y las omisiones de Gertz Manero
Del sexenio de Peña Nieto al de AMLO
Entre 2013 y 2017, la PGR abrió cinco investigaciones contra Mendoza Gaytán. Durante el sexenio de López Obrador, se sumaron otras cuatro.
Pero no hubo órdenes de aprehensión ni operativos exitosos. Esto, a pesar de que:
- La Sedena sabía dónde operaba
- La Guardia Nacional lo tenía geolocalizado
- El Departamento del Tesoro de EE.UU. lo incluyó en su lista negra
“Cómo es posible que ni la FGR de Gertz Manero ni la Sedena lo hayan detenido”, cuestionó la periodista.
Impunidad con nombre y apellido: Una cadena de negligencias
De lo local a lo federal: Nadie actuó
Los documentos revelan una estructura de corresponsabilidad institucional en los tres niveles de gobierno. Las negligencias incluyeron:
- Ignorar informes con información precisa
- No ejecutar operativos de captura
- Encubrir estructuras de reclutamiento y exterminio
- No investigar a funcionarios involucrados
Anabel Hernández califica esto como negligencia criminal.
¿Dónde está El Sapo hoy?
Mendoza Gaytán sigue prófugo. Su estructura criminal continúa activa en la región Valles de Jalisco. Pese a su historial, ni la Sedena ni la FGR han dado información reciente sobre su búsqueda.
Lo más grave, según Hernández, es que la red de protección sigue operando.
“Mientras no haya voluntad política y judicial, estos campos de exterminio seguirán existiendo con la complicidad del Estado”.
¿Qué nos dice el caso de El Sapo sobre México?
Este caso no solo refleja el poder del CJNG, sino también la descomposición institucional en México.
Preguntas clave que siguen sin respuesta:
- ¿Quién protege hoy a El Sapo?
- ¿Cuántos más como él están operando impunemente?
- ¿Qué otros funcionarios están involucrados?
La falta de justicia en este caso revela que no es solo un problema de crimen organizado, sino también de Estado fallido en zonas clave del país.
¿Es posible romper el pacto de impunidad?
El caso de Gonzalo Mendoza Gaytán es más que una omisión: Es un espejo. Un espejo donde México se ve a sí mismo tolerando lo intolerable, permitiendo que la corrupción institucional proteja a quienes siembran terror y muerte.
¿Podrá la próxima administración romper ese pacto de impunidad?
La respuesta aún está enterrada en los campos de exterminio de Teuchitlán.