Roberto “N”, exgobernador de Nayarit durante el sexenio 2011-2017, ha sido vinculado a proceso por segunda ocasión. Esta vez, la decisión judicial se centra en su presunta participación en el uso de recursos de procedencia ilícita, un caso que la Fiscalía General de la República (FGR) ha perseguido con ahínco.
Detalle de la segunda vinculación a proceso
La Fiscalía General de la República (FGR) anunció una segunda vinculación a proceso en contra de Roberto “N”, quien fuera titular del gobierno de Nayarit entre 2011 y 2017. Esta decisión judicial se dio el 11 de septiembre de 2025, tras una extensa jornada que se prolongó por casi 48 horas.
El exgobernador fue vinculado por su probable intervención en el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, involucrando una suma superior a los 156 millones de pesos. Esta medida cumple con una ejecutoria de amparo previa, que ordenó al juez de control reponer la audiencia inicial y fundamentar su resolución.
El historial judicial de Roberto “N”
La detención de Roberto “N” ocurrió el 6 de junio de 2021 en Linares, Nuevo León, luego de permanecer casi un año en fuga. Desde entonces, ha permanecido internado en el penal de El Rincón, en Nayarit, donde seguirá su proceso judicial en prisión preventiva.
El político ha sido acusado de múltiples delitos, incluyendo enriquecimiento ilícito, peculado, operaciones con recursos de procedencia ilícita y falsificación de documentos, entre otros. Recientemente, el pasado 9 de septiembre, fue encontrado culpable por el delito de falsificación, aunque otras causas judiciales aún están pendientes.
Vínculos con el crimen organizado y medidas cautelares
Además de los cargos mencionados, Roberto “N” ha sido señalado por su ex secretario de Seguridad, Edgar “V”, durante sus testimonios ante autoridades de Estados Unidos, como un presunto enlace con el narco. Esta declaración añade una dimensión más grave a su expediente.
Tras analizar los argumentos de la FGR, el juez de control determinó la existencia de indicios razonables para atribuirle la comisión del delito. Por ello, el exgobernador continuará bajo la medida cautelar de prisión preventiva justificada por el tiempo que dure el proceso penal.
Con esta nueva vinculación y las múltiples causas judiciales pendientes, el futuro legal de Roberto “N” permanece incierto, marcando un precedente en la lucha contra la corrupción en la función pública. ¿Qué implicaciones tendrá este prolongado proceso para la política nayarita?