Canelo Álvarez recibe dura crítica de David Faitelson tras su pelea con Scull. ¿Marca esto el inicio del fin del tapatío en el boxeo?
La noche prometía gloria, pero terminó en decepción. Canelo Álvarez ganó en el ring, pero perdió fuera de él: David Faitelson lo fulminó con una sentencia demoledora. Y el boxeo, como siempre, se debate entre la leyenda y el declive.
Un triunfo con sabor amargo: ¿ganó realmente Canelo Álvarez?
¿Qué ocurrió en Riad?
El escenario era majestuoso: la ANB Arena de Riad albergó una pelea que, en el papel, debía ser otra muestra del poder de Saúl “Canelo” Álvarez. Enfrente, el cubano Scull, disciplinado, técnico, paciente.
Aunque Canelo se llevó la victoria y mantuvo su estatus como campeón indiscutido de las 168 libras, la impresión general fue de insatisfacción.
“Nunca descifró el plan del cubano” — resumen lapidario de varios analistas en redes sociales.
La crítica más severa: David Faitelson
David Faitelson, uno de los periodistas deportivos más influyentes y polémicos de México, no se guardó nada.
A través de redes sociales, publicó una frase que se volvió viral:
“El fin se acerca”, en referencia directa al nivel mostrado por el tapatío.
Según Faitelson, esta fue una de las peores exhibiciones en la carrera de Álvarez.
Más allá del resultado oficial, el periodista puso en duda el estado físico, mental y competitivo del boxeador mexicano.
El desgaste de una leyenda: signos del declive de Canelo
Rendimiento a la baja
Desde hace al menos tres peleas, analistas han notado que el ritmo de Canelo ya no es el mismo.
Aunque su defensa sigue siendo sólida, su agresividad, precisión y lectura táctica parecen haber disminuido.
- Contra Bivol, fue superado claramente.
- Contra Ryder, no convenció.
- Y ahora, contra Scull, simplemente no dominó como se esperaba.
Falta de evolución táctica
Uno de los grandes reclamos, incluso de sus seguidores más leales, es que Canelo no ha sabido reinventarse.
A diferencia de otros campeones longevos, como Mayweather o Pacquiao, el mexicano parece haber tocado techo.
Faitelson lo sugiere entre líneas: Canelo pelea en modo automático, sin creatividad ni sorpresas.
Las redes y los fans no perdonan: reacciones tras la pelea
Críticas encendidas en X (antes Twitter)
En cuestión de minutos, las palabras de Faitelson se replicaron por miles.
Las reacciones oscilaron entre el apoyo total a sus comentarios y la defensa acérrima de Canelo.
Algunos de los mensajes más destacados:
- “Ganó, pero no convenció.”
- “Se ve lento, predecible. ¿Será el principio del fin?”
- “Scull se le plantó y no supo qué hacer.”
Fanáticos divididos
Una parte del público sigue confiando en el ídolo jalisciense. Otra empieza a preguntarse si ya es momento de retirarse en lo alto, antes de que las derrotas borren su legado.
La importancia de las formas en el boxeo moderno
No basta con ganar
Hoy, el boxeo también es espectáculo.
Canelo ganó, sí. Pero no dominó, no impactó, no emocionó.
Y eso, para figuras de su talla, es un problema.
David Faitelson lo sabe, y por eso sus palabras pesan más que nunca.
“El problema no es perder: es aburrir, es dejar de emocionar.”
La presión de ser leyenda
Convertirse en el campeón indiscutido conlleva una exigencia doble: no solo ganar, sino demostrar superioridad.
Canelo enfrenta ahora un dilema:
¿seguir compitiendo con lo justo o arriesgar su legado en busca de una última gran pelea?
¿Y ahora qué sigue para el Canelo?
Posibles rivales y escenarios
Si decide seguir, los nombres que se barajan para su próximo combate son:
- David Benavídez – El rival que más expectativa genera.
- Jermall Charlo – Un duelo de campeones estadounidenses.
- Revancha con Bivol – Riesgo alto, recompensa dudosa.
¿Retiro estratégico?
Canelo podría optar por una salida elegante: una última pelea mediática y adiós.
O bien, seguir sumando peleas sin mucho brillo, como la de Riad, y exponer su imagen.
Faitelson lo insinúa crudamente: si sigue así, será recordado por su declive, no por su cima.El boxeo no perdona el desgaste. Aún con el brazo en alto, Canelo Álvarez parece haber perdido otra batalla: la de la percepción pública.
Y mientras Faitelson lanza una advertencia, millones de fanáticos se preguntan:
¿Es este el inicio del adiós del último gran ídolo del boxeo mexicano?