Mientras América y Cruz Azul libraban un duelo clave en la Concacaf Champions Cup 2025, las miradas se desviaron hacia un palco: ahí estaba Jesús Ernesto López Gutiérrez.
La imagen que encendió el debate nacional
Jesús Ernesto López, hijo menor del expresidente Andrés Manuel López Obrador, fue captado el martes 1 de abril en el Estadio Ciudad de los Deportes.
Aunque su presencia podría pasar como la de cualquier aficionado, su aparición en un palco privado mientras apoyaba al América generó controversia inmediata.
En redes sociales, el tema escaló rápidamente:
- Se viralizaron fotos y videos del joven con actitud relajada.
- Algunos usuarios interpretaron la escena como un símbolo de contradicción con los ideales de su padre.
- Otros simplemente ironizaron sobre su “maldición” para Cruz Azul.
¿Una simple preferencia futbolera o un símbolo político?
El contraste con el lema “Primero los pobres”
Desde la campaña presidencial de AMLO, el eslogan “primero los pobres” fue bandera ideológica.
Sin embargo, ver a su hijo en un palco exclusivo, disfrutando un partido del América —equipo asociado históricamente con el poder económico— desató críticas de incongruencia familiar.
“¿No que primero los pobres? ¿Y el niño en el palco del América?”, comentaba un usuario en X (antes Twitter).
Recordando los dichos de AMLO sobre su hijo y el América
Esta no es la primera vez que Jesús Ernesto es mencionado por su pasión futbolera.
Durante una gira en 2023, AMLO declaró públicamente:
“Que tan tolerantes somos que este jovencito decidió irle al América. Imagínense, eso en esta casa. Pero bueno, esas cosas se quitan con el tiempo jajaja”.
La anécdota, en su momento, generó simpatía. Hoy, parece reforzar la narrativa de distancia entre discurso y práctica, al menos en el terreno simbólico.
El clásico entre América y Cruz Azul, en segundo plano
A pesar del espectáculo deportivo que significó el partido de ida de los Cuartos de Final de la Concacaf Champions Cup 2025, gran parte de la atención mediática y digital se desvió hacia el palco.
Un fenómeno más allá del fútbol
Lo ocurrido refleja cómo la vida privada de figuras asociadas al poder sigue generando lecturas sociales profundas, incluso en contextos aparentemente triviales como un partido de fútbol.
El evento abre preguntas sobre:
- La exposición mediática de hijos de exmandatarios.
- El uso simbólico del fútbol como marcador ideológico.
- Las nuevas formas de escrutinio ciudadano en la era digital.
La polémica por Jesús Ernesto y el América revela cómo, en México, nada es realmente ajeno a la política. Ni el fútbol.
¿Es válido exigir coherencia ideológica a los hijos de los líderes? ¿O estamos proyectando en ellos una carga que no eligieron?
El palco, el jersey y los colores que se eligen pueden hablar más de lo que creemos.