Ángela Aguilar, en plena promoción de su álbum “Nadie se va como llegó”, ha compartido experiencias personales que han capturado la atención de sus seguidores. La cantante reveló que siente la presencia de sus abuelos, Antonio Aguilar y Flor Silvestre, a través de mariposas y colibríes.
La conexión de Ángela Aguilar con sus abuelos
Durante una serie de entrevistas en México, Ángela Aguilar ha estado promocionando su nuevo álbum “Nadie se va como llegó”, pero también ha revelado detalles íntimos sobre su vida, incluyendo su matrimonio con Christian Nodal y cómo ha enfrentado las críticas. Algo que ha llamado la atención es su interpretación de ciertos símbolos, como las mariposas.
El símbolo de la mariposa
Ángela Aguilar relató que, en un momento de ansiedad antes de subir al escenario, una figura similar a una mariposa se posó en su mano. Este hecho la conmovió profundamente, ya que sintió que era una señal de su abuela, Flor Silvestre.
“Hace poquito en un show se me paró… no era una mariposa… era como algo así, sí, algo así. Después de mucho tiempo, de mucha crítica, de mucha crueldad… Yo tenía mucho miedo de subirme a un escenario, que para mí eso era mi casa”, confesó Ángela Aguilar. “Entonces yo traía mucha ansiedad y de repente se me para una mariposa y no me deja en toda la canción. Y yo ahí sentí que era mi abuela”.
El colibrí como recuerdo de Antonio Aguilar
En otra ocasión, durante una charla con Mariano Osorio, Ángela Aguilar se distrajo al ver un colibrí cerca de ella. Esta ave le recordó a su abuelo, Antonio Aguilar.
“Ay, qué lindo. Perdón, es que pasó un colibrí y me acordé mucho de mi abuelo. Siempre que estoy nerviosa o insegura me llega una mariposa o sale un colibrí de verdad me siento como muy cuidada”, reflexionó la cantante.
Homenaje a Flor Silvestre en “A dos de borrarte”
Además de estas experiencias personales, Ángela Aguilar rindió homenaje a su abuela Flor Silvestre en el video oficial de su canción “A dos de borrarte”. La cantante recreó el vestuario, los movimientos y la esencia de un video clásico de su abuela.
“El video lo grabé en Ciudad de México y fue un homenaje a mi abuela. Porque esta canción es muy tradicional mexicana de mariachi… un tipo como el que se escucha en las cantinas. Como un ‘Volver, volver’ o sea ni a los talones le llego, pero esa fue la inspiración”, declaró en entrevista con Pati Chapoy.
Ángela Aguilar ha encontrado consuelo y conexión con sus abuelos a través de símbolos como las mariposas y los colibríes, reafirmando el legado familiar en su vida y carrera. Su homenaje a Flor Silvestre en “A dos de borrarte” es una muestra más de este vínculo.