La dinámica dentro de La Granja VIP sufrió un giro inesperado el pasado 5 de noviembre cuando el primer enfrentamiento entre Alfredo Adame y Alberto del Río escaló a una guerra sin cuartel. Lo que comenzó con el luchador defendiendo a Manola de las agresiones verbales de Adame, culminó con el conductor exponiendo el sensible tema de violencia contra una mujer que persigue a El Patrón, buscando afectar su estancia y sus relaciones dentro del reality show.
La explosión en el comedor: Adame vs. El Patrón
La tensión en el programa se mantuvo desde el momento en que Alberto del Río defendió a Manola, después de que Adame le lanzara comentarios desmedidos al ver cómo se caía la materia prima destinada a las tortillas. Tras este incidente, la convivencia cambió radicalmente, culminando en las nominaciones, donde Adame aprovechó su turno para lanzar un ataque personal.
La acusación de Adame: el ataque personal
Alfredo Adame utilizó su voto y algunas nominaciones para interrogar a las mujeres de La Granja VIP sobre su opinión respecto a la “brutal forma en la que El Patrón agredió a una mujer de 1.60 metros de altura”. Adame se refirió directamente al tema de “violencia contra una mujer” por el que fue acusado el exintegrante de la WWE.
Ante este comentario reiterado, y sumado a una nueva amenaza de agarrarlo a golpes dentro del programa, Alberto del Río decidió hacer una pausa en la competencia. El luchador optó por hablar con todos los granjeros, quienes se encontraban sentados en la mesa del comedor antes de irse a dormir.
Alberto del Río rompe el silencio y agradece la amistad
Alberto del Río quiso dejar claro que, si bien no tenía por qué darle explicaciones a nadie, y que ese capítulo en su vida ya lo había cerrado, sintió la necesidad de aclarar lo que realmente ocurrió debido al respeto y la amistad que había formado.
El Patrón agradeció profundamente la forma en que fue recibido por los participantes. Reconoció que llegó sin expectativas sobre las relaciones que podría formar y no quería que los comentarios de violencia afectaran los lazos que ha construido a lo largo de las semanas de competencia.
> “En estas situaciones me vale madre el programa. Me vale más la amistad y lo que ustedes me han entregado, porque yo llegué aquí pensando que me iban a aventar a una orilla por ser de una industria del espectáculo diferente. Me recibieron de una forma increíble absolutamente todos. Me hicieron volver, y lo juro por la memoria de la madre de mis hijos y por mis hijos, me hicieron volver a confiar. A confiar que sí se puede, que sí hay buena gente”, dijo El Patrón.
La versión del luchador sobre la extorsión en Estados Unidos
Alberto del Río dejó claro que el comentario de descargo se debía a que sentía un profundo cariño y respeto por todas las personas en La Granja VIP. Explicó que el ver que lo querían por cómo es y no por su dinero es lo que le permitió conectar de verdad con ellos.
Fue gracias a este apoyo que decidió aclarar el tema sobre la acusación de violencia contra una mujer que sufrió hace algunos años en Estados Unidos.
> “Lo hago, y lo juro por todo lo sagrado que yo tengo, por el respeto a ustedes y lo que me han otorgado, que es su amistad, y que espero y sé que me la voy a llevar, la de la mayoría o la de casi todos o todos, después de estas paredes”, afirmó Alberto antes de comenzar su relato.
El Patrón detalló que lo que realmente pasó fue que una persona intentó extorsionarlo hace años. El relato indicaba que la mujer le habría preguntado cuánto valían su carrera y su libertad. Después de esa pregunta, ella acudió a las autoridades para inventar que la había golpeado brutalmente.
Puntos clave revelados por El Patrón:
- Una mujer intentó extorsionarlo hace años.
- Ella le dijo: “¿Cuánto vale tu carrera y cuánto vale tu libertad?”.
- Alberto del Río la tenía grabada, y le advirtió que tuviera cuidado porque la tenía grabada.
- Ella hizo acusaciones falsas.
- Las acusaciones falsas fueron comprobadas al momento.
- En el relato de Alberto del Río se indicó que la mujer dio positivo a sustancias ilegales cuando fue llamada a declarar.
> “Fue e hizo unas acusaciones falsas que fueron comprobadas al momento”, expresó el luchador.
La intervención del FBI y la conspiración desmantelada
El Patrón confirmó la participación del FBI en el caso, pero precisó que la agencia estadounidense intervino a su favor, desmintiendo el contexto planteado por Alfredo Adame.
El luchador dejó claro que mentir no es un delito penal en este contexto, pero la conspiración sí lo es. El FBI entró a investigar el caso de extorsión y comprobó que existía una conspiración con la amiga, el hermano y ella, cuyo objetivo era sacarle dinero.
> “El FBI se metió a investigar a mi favor. Porque aunque ir a mentir no es un delito penal, el… la conspiración sí lo es. Entonces, al entrar el FBI y comprobar una conspiración con la amiga, el hermano y ella para tratar de sacarme dinero, se empieza un proceso contra esta persona”, dijo El Patrón.
Tras presentar todas las pruebas que demostraban el intento de extorsión, el caso fue desestimado en el juzgado. Luego de su declaración, Lola Cortés y el resto de granjeros abrazaron a El Patrón, brindándole apoyo.
Del Río cerró su mensaje dejando claro que hacía todo esto para que los granjeros no cambiaran su percepción debido al juego sucio que, según él, estaba realizando Alfredo Adame. Subrayó que es una persona transparente y que el tema sacado a colación por el conductor es algo que lastimó mucho a su familia.
“Se los quería decir para que lo supieran de mi viva voz (…) si el señor conoce el escándalo, sabe el resultado final”, concluyó Alberto del Río.
El enfrentamiento dentro de La Granja VIP expuso no solo la tensión competitiva, sino el uso de información sensible y personal como herramienta de ataque. ¿Hasta qué punto es ético dentro de la dinámica de un reality show reabrir heridas familiares y legales bajo la excusa del entretenimiento, y qué consecuencias tendrá este despliegue de acusaciones verificadas por la propia voz de Alberto del Río?




