Hace diez años fue conocido como uno de “Los reyes del after”, un apodo viral en la Zona Rosa de Ciudad de México. Hoy, Óscar Villarruel abandera una lucha distinta: la sobriedad. Su nueva faceta como creador de contenido llega tras un reencuentro con Luisito Comunica y marcada por el trágico destino de sus antiguos compañeros.
El origen de “Los reyes del after” y el costo de la fama efímera
Óscar Villarruel saltó a la fama hace una década. Su aparición se dio en un video grabado por el generador de contenido Luisito Comunica, cuyo nombre de pila es Luis Arturo Villar Sudek.
En aquella ocasión, Villarruel estaba “enfiestado” en la Zona Rosa, una de las áreas de Ciudad de México (CDMX) más populares por su vida nocturna. Estaba en compañía de sus amigos Pancho y Jorge, razón por la que el grupo recibió el icónico apodo por el que son recordados: “Los reyes del after”.
Sin embargo, más allá de la fama momentánea, la vida de los tres jóvenes cambió drásticamente. Cada uno afrontó problemas relacionados con las adicciones.
Las tragedias que forzaron la reivindicación
Durante un reencuentro con Luis Comunica, el cual fue grabado y publicado en YouTube el pasado 20 de octubre, Óscar Villarruel dio a conocer el destino de sus antiguos compañeros:
- Pancho murió luego de que “se autoincendió”.
- Jorge se encuentra actualmente en calidad de desaparecido.
El impacto de estos sucesos no solo marcó a Óscar Villarruel, sino que lo impulsó a reivindicar el rumbo de su propia vida.
La recuperación de Óscar Villarruel: Dos años de sobriedad
Tras coincidir con Luisito Comunica, quien tiene 34 años de edad y también es empresario, Óscar Villarruel se sumó al mundo de las redes sociales. Hoy, en Instagram, se presenta como “exrey del after party” y, sobre todo, asegura estar “en recuperación constante”.
El alcoholismo es la enfermedad que influyó en muchas de sus decisiones, pero ahora se enfoca en sanar “desde adentro hacia afuera”. Él da testimonio de sus dos años de sobriedad, con el objetivo de motivar a otras personas a salir adelante, tal como le sucedió a él.
En su mensaje de recuperación, Villarruel reflexiona sobre su pasado: “Me destruí pensando que me divertía”.
El nuevo rol como generador de contenido
Óscar Villarruel reapareció en redes sociales tras ofrecerle una nueva entrevista a Luisito Comunica. El mismo 20 de octubre, Luisito Comunica le dio la bienvenida a esta faceta como generador de contenido e hizo un llamado en sus redes sociales: “Vayan a seguir al buen Óscar en este nuevo camino”.
De momento, el nuevo creador de contenido ya hizo cuatro publicaciones para compartir un poco de su vida y recuperación.
Mediante un video, Óscar Villarruel narró los pilares de su recuperación:
- Grupo de ayuda: Asiste a un grupo de ayuda para seguir con su recuperación tras dejar el alcoholismo.
- Red de apoyo: En este grupo alienta a otras personas, por lo que se trata de una red de apoyo mutuo.
- Ejercicio físico: De momento realiza caminatas en compañía de “Ramón”, ya que espera ganar fuerza para que luego puedan correr.
El exrey del after explica la necesidad de este apoyo constante: “Es importante asistir al grupo porque también de ahí parte mi recuperación (…). Y, de paso, (sirve para) ayudar a otros que también están sufriendo”.
A la par de esto, Óscar Villarruel está aprendiendo a grabar para hacer contenido para sus redes sociales, por lo que le pide a la gente sus consejos y su punto de vista para mejorar en esta nueva faceta.
Román: el compañero de vida y recuperación
Un dato clave en la nueva vida de Óscar Villarruel es la presencia de su fiel amigo desde hace cinco años: “Román”. Román es un Pitbull que rescató del “mundo de las peleas”.
Óscar lo describe como “su compa” y considera que ambos están empezando de nuevo. Con cariño, asegura que “Él sabe que es el más consentido de la casa”.
El testimonio de Óscar Villarruel, el “exrey del after party” que pasó de la noche a la sobriedad, utiliza ahora su plataforma para mostrar que la reinvención es posible, incluso después de tocar fondo. Su historia, marcada por la pérdida y la recuperación, se convierte en un faro para quienes buscan dejar atrás la adicción y comenzar un camino de sanación.
