Si el presidente Donald Trump decide enviar bombarderos estadounidenses para ayudar a Israel a destruir una instalación subterránea de enriquecimiento de uranio en Irán, probablemente dará inicio a una fase más peligrosa de la guerra. Este movimiento potencial podría transformar el conflicto en la región.
Escenarios de escalada si Estados Unidos entra en guerra
Existen varias formas en que la situación podría desarrollarse si Estados Unidos se involucra militarmente:
Ataque a Fordow: La demolición de Fordow, el centro de enriquecimiento enterrado en las profundidades de una montaña, podría no acabar con el programa nuclear iraní. Esto podría llevar al país a ampliar la guerra o acelerar dicho programa.
Asesinato del líder supremo: Si Estados Unidos asesina al líder supremo de Irán, como Trump insinuó que era posible, no hay garantías de que sea sustituido por un líder más amistoso.
La cúpula clerical autocrática de Irán ha demostrado su poder de permanencia. Han gobernado durante casi medio siglo desde la Revolución Islámica de 1979, incluso frente a múltiples revueltas internas.
Contexto previo al ataque
Antes de que Israel lanzara un ataque sorpresa contra el programa nuclear iraní y otros objetivos la semana pasada, Irán y Estados Unidos estaban discutiendo los límites del programa iraní de enriquecimiento de uranio.
El programa estaba produciendo rápidamente combustible cercano a los niveles necesarios para las armas nucleares. A cambio de nuevos límites, Irán obtendría un alivio de las sanciones económicas.
Las dos partes no estaban cerca de un acuerdo definitivo. Sin embargo, a principios de junio habían surgido indicios de un posible compromiso. Cuando Israel atacó Irán, las negociaciones se vinieron abajo.
La posibilidad de que Estados Unidos actúe podría significar que el conflicto entra en una fase mucho más peligrosa que las anteriores.