La desesperación duró casi 40 minutos. “Choquito”, un perrito ciego, luchó por mantenerse a flote en una piscina cubierta, agotándose hasta hundirse. Justo en el momento más crítico, apareció Vinicius Orlando, el limpiador de piscinas de 38 años, quien, en un acto que hoy conmueve a Brasil, protagonizó un crucial rescate de un perrito.
La extraña llegada y la ausencia de “Choquito”
La conmovedora escena tuvo lugar en una residencia privada ubicada en Goiânia, Brasil. Vinicius Orlando, quien lleva trabajando 15 años para la familia, arribó al hogar. El trabajador, de 38 años, utilizó la llave de acceso que posee, pero inmediatamente notó una anomalía en la rutina:
- Ausencia inexplicable: “Choquito”, la mascota de la familia, no salió a recibirlo, como solía hacerlo.
- Ruido de alerta: Vinicius mencionó que escuchó un ruido extraño que lo dirigió hacia la zona de la alberca.
El perrito ciego no se encontraba por ninguna parte, lo que incrementó la preocupación del empleado.
Cuarenta minutos bajo el agua: el hallazgo en la piscina
La mascota había caído a la alberca y, en un esfuerzo desesperado por sobrevivir, había estado nadando durante casi 40 minutos para mantenerse a flote. Agotado, el animal se cansó y terminó en el fondo del estanque.
Al llegar a la zona, Vinicius Orlando notó que una parte de la lona que cubría la piscina estaba hundida. Cuando el limpiador la retiró, descubrió a “Choquito” inconsciente al fondo de la alberca.
Sin dudarlo un minuto, Vinicius:
- Retiró la lona por completo.
- Se quitó sus cosas de valor de las bolsas del pantalón.
- Rápidamente, se lanzó al agua para rescatar al perrito.
El masaje cardíaco que revirtió la muerte
Vinicius Orlando narró que, al sacar al perrito del agua, “Choquito” estaba completamente inconsciente y ya no respiraba. Ante la emergencia, el trabajador comenzó a masajear su corazón y su pancita.
Después de un par de minutos de reanimación, el perrito tosió y volvió a respirar. Este acto heroico quedó grabado gracias a una cámara de seguridad instalada en el patio del hogar.
El testimonio del dueño: un alivio impensable
Danilo Soares, dueño de “Choquito”, comentó la magnitud del alivio. Para su familia, el perrito ciego es “como un hijo”.
Soares relató que, al recibir la llamada de su empleado, Vinicius, él imaginó el desenlace más trágico: “En mi cabeza pensaba que íbamos a llegar a casa y Choquito estaría muerto”. Por la preocupación, incluso tomó precauciones, pues le pidió a su esposa que no llevara a su hija, ya que ella es “muy apegada a él”.
Sin embargo, al revisar el video grabado por la cámara de seguridad y ver que su perrito resucitaba, el alivio fue mayúsculo. El dueño confirmó que, cuando él llegó a casa, la mascota ya estaba consciente de nuevo.
Danilo Soares llamó a un amigo suyo que es veterinario, quien corrió a la casa para asegurarse de que el perrito estuviera bien. El veterinario realizó análisis de sangre y comprobó que no había agua en el pulmón de Choquito. Danilo contó que “todo está bien. Media hora después, ni siquiera parecía que hubiera pasado por esta asfixia”.
La historia de Choquito y Vinicius Orlando no es solo una anécdota de rescate, sino la prueba fehaciente de la conexión profunda que existe entre humanos y animales, y cómo la rápida reacción y el compromiso profesional pueden interceptar a la muerte. ¿Cuántas vidas pasan desapercibidas hasta que un acto de bondad extrema las ilumina?




