CURP con biométricos: Colectivos de familiares critican la propuesta de Sheinbaum y exigen acciones más serias para la búsqueda de desaparecidos.
Una carta. Un nuevo intento de ser escuchadas. Madres buscadoras de todo México alzaron la voz nuevamente, cuestionando la estrategia de la presidenta Claudia Sheinbaum para enfrentar la crisis de desapariciones. En el centro del debate: La propuesta de crear una CURP con datos biométricos.
Una crisis nacional que sigue sin respuesta
México: Más de 100 mil personas desaparecidas
Desde hace más de una década, México enfrenta una de las crisis humanitarias más profundas de su historia reciente. Según datos oficiales, más de 100,000 personas continúan desaparecidas en el país, una cifra que ha crecido en sexenios sucesivos sin que ninguna administración haya logrado revertir la tendencia.
Detrás de cada número hay un nombre, una historia, una familia que busca.
“Lo que esperamos no son promesas, sino acciones de verdad. Ya pasaron demasiados gobiernos con discursos huecos”, declaró una madre buscadora de Sinaloa que pidió el anonimato.
La propuesta presidencial: CURP con datos biométricos
¿Qué plantea Sheinbaum?
En marzo de 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum retomó una antigua iniciativa de sexenios pasados: Convertir la CURP en un documento oficial de identidad con fotografía, huellas dactilares y datos biométricos.
Según el discurso oficial, esta medida busca:
- Prevenir casos de desaparición al contar con una base de identificación inmediata.
- Agilizar procesos de búsqueda e identificación forense.
- Reforzar mecanismos de control institucional.
No obstante, la propuesta ha generado fuertes críticas desde los colectivos de búsqueda.
El problema: Más preguntas que respuestas
Los colectivos señalan que la medida carece de claridad operativa y, sobre todo, no atiende las causas estructurales de la desaparición.
“¿De qué sirve tener datos biométricos si nadie va a buscarlos?”, pregunta con indignación un colectivo del estado de Veracruz.
Entre las principales críticas:
- No se ha explicado cómo funcionará el sistema.
- Se ignora la legislación existente sobre identificación forense.
- No hay garantías sobre el uso ético de la información.
- Podría tener fines de control más que de protección.
Reacción de los colectivos: “Esperamos acciones de mayor seriedad”
Una nueva carta al gobierno federal
El 26 de marzo de 2025, diversos colectivos de familiares de personas desaparecidas enviaron una segunda carta a la presidenta Sheinbaum, reiterando su preocupación y exigiendo un verdadero diálogo.
Entre los firmantes destacan:
- Glorieta de las y los Desaparecidos
- Colectivo Solecito de Veracruz
- Voz y Dignidad por los Nuestros (San Luis Potosí)
- Sabuesos Guerreras (Sinaloa)
- Madres Buscadoras de Sonora
La carta fue difundida ampliamente en redes sociales bajo el hashtag #AccionesSeriasYa.
Críticas al desinterés oficial
Los colectivos expresaron su malestar por el trato recibido por parte de la administración:
“Se nos ignora mientras se da espacio en La Mañanera a youtubers que fueron al rancho Izaguirre”, denuncian en el documento.
Esto en referencia a una reciente transmisión donde influencers fueron recibidos durante más de una hora, mientras las familias llevan años esperando una audiencia formal.
Falta de cumplimiento legal: Un patrón preocupante
Violaciones a la Ley General en Materia de Desaparición
Una de las críticas más graves señaladas por los colectivos es que la actual administración ha incumplido disposiciones legales fundamentales, como:
- El nombramiento irregular de la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda.
- El abandono del Registro Nacional de Personas Desaparecidas.
- La falta de actualización y presupuesto para los mecanismos forenses.
“No se trata solo de tecnología. Se trata de voluntad política”, insisten los colectivos.
¿Qué hay detrás del uso de biométricos?
Historia de una idea reciclada
La propuesta de una CURP con datos biométricos no es nueva. Fue planteada durante los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, con fuertes resistencias de organizaciones civiles.
En ambos casos, la implementación fracasó por:
- Falta de consenso social
- Temor al mal uso de los datos
- Riesgos de control poblacional
Ahora, bajo una nueva administración, la propuesta reaparece con otro rostro, pero con las mismas dudas.
Riesgos potenciales
Organizaciones como el Centro Prodh y Artículo 19 han advertido sobre los riesgos asociados al uso de datos biométricos sin controles adecuados:
- Posible violación a derechos humanos.
- Uso indebido por parte de fuerzas de seguridad.
- Falta de transparencia en la custodia de la información.
“Ya sabemos cómo se maneja la información en este país. No queremos que se use para espiarnos, sino para protegernos”, comentó una activista de Oaxaca.
¿Por qué la CURP biométrica no resuelve la desaparición?
Diagnóstico equivocado
Los colectivos insisten en que el problema de fondo no es la falta de identificación, sino la omisión institucional y la impunidad.
Factores clave del fenómeno:
- Colusión entre autoridades y crimen organizado.
- Falta de capacidad de reacción inmediata.
- Déficit forense acumulado.
- Subregistro y desconfianza en el Estado.
La CURP biométrica no ataca ninguna de estas raíces.
La búsqueda no es tecnológica, es política
En su carta, las familias insisten en que la prioridad debe ser:
- Fortalecer la Comisión Nacional de Búsqueda.
- Garantizar la participación de las familias en el diseño de políticas.
- Dotar de recursos reales a las fiscalías estatales.
- Coordinar estrategias con enfoque regional y diferencial.
Las familias toman la iniciativa
Hacia una propuesta propia
Cansadas de esperar, las familias anunciaron el inicio de un proceso de consulta entre colectivos para elaborar una propuesta alternativa de política pública.
Este documento, una vez terminado, será enviado formalmente al Ejecutivo Federal.
“No pretendemos hablar por todas, pero sí construir desde la experiencia”, indican en la carta.
El enfoque será desde abajo, basado en:
- Testimonios de campo
- Experiencias de búsqueda
- Principios de justicia transicional
- Normativas nacionales e internacionales
La diversidad del movimiento buscador
En México existen más de 200 colectivos de búsqueda, cada uno con dinámicas distintas, pero con un objetivo común: Encontrar a sus seres queridos.
Por eso, el proceso de consulta reconoce su diversidad y autonomía, pero busca puntos en común para incidir políticamente.
¿Qué sigue para Sheinbaum y las políticas de búsqueda?
El dilema del poder
La presidenta enfrenta una oportunidad única: Cambiar el rumbo de una política pública fracasada durante años.
Pero también carga con el peso de la desconfianza social acumulada.
Sus decisiones en los próximos meses marcarán:
- Su relación con las víctimas.
- Su capacidad de diálogo democrático.
- La legitimidad de su gobierno ante crisis humanitarias.
¿Un punto de inflexión?
El momento actual podría ser un punto de inflexión histórico:
- Si se escucha y se incorpora la voz de las familias.
- Si se ajustan las medidas a los marcos legales vigentes.
- Si se pone el foco en la verdad, la justicia y la reparación.
“Es ahora o nunca”, concluye una madre de Jalisco que ha buscado a su hijo por más de 8 años.
¿Y si empezamos por escuchar?
La crisis de desapariciones en México no se resolverá con una nueva CURP, por más biométrica que sea. Requiere algo mucho más profundo: Voluntad, justicia, empatía y memoria.
¿Está dispuesta la administración actual a dejar atrás las soluciones cosméticas y mirar de frente a las víctimas?
El país espera respuestas. Las familias exigen acción.