En plena jornada laboral, el calor sofocante se cuela entre los escritorios. Las ideas se dispersan, el cuerpo se agota. Así comienza el riesgo del golpe de calor en oficinas.
El enemigo invisible del rendimiento: el calor en la oficina
Las altas temperaturas no sólo afectan a quienes trabajan al aire libre. También los oficinistas enfrentan un enemigo silencioso: el calor excesivo en espacios cerrados.
“La productividad puede disminuir y el calor puede generar fatiga mental, estrés y aumentar el presentismo, impactando la calidad del trabajo”, explica Gabriel Real Ornelas, experto en Toxicología del IMSS.
Consecuencias del calor en oficinas:
- Disminución de eficiencia en tareas cognitivas
- Más errores y menor atención
- Fatiga y estrés crónico
- Riesgo de deshidratación y golpes de calor
Medidas clave para prevenir el golpe de calor en el trabajo
1. Pausas estratégicas
Descansar 5 minutos cada 45-60 minutos cuando la temperatura supera los 30 °C permite al cuerpo recuperarse del estrés térmico.
2. Hidratación constante
El IMSS recomienda:
- 2 a 2.5 litros de agua por jornada de 8 horas en ambientes calurosos
- 0.7 a 1 litro por hora si hay actividad física en temperaturas de 26 a 32 °C
Evita bebidas azucaradas o con cafeína, que pueden aumentar la deshidratación.
3. Vestimenta adecuada
Usa ropa:
- Ligera, de algodón o lino
- De colores claros
- Evita prendas sintéticas o ajustadas
4. Ventilación inteligente
Para mantener una oficina fresca sin abusar del aire acondicionado:
- Abre ventanas en lados opuestos para generar corrientes de aire
- Usa ventiladores
- Mantén cortinas cerradas durante las horas más calurosas
5. Uso de plantas de interior
Plantas como palmera areca, cuna de Moisés o ficus ayudan a refrescar el ambiente gracias a la evapotranspiración. Además, purifican el aire y generan bienestar.
6. Colores claros en paredes y techos
Los colores oscuros retienen calor. Pintar con tonalidades claras ayuda a mantener una temperatura más agradable.
Síntomas de golpe de calor: ¡atención inmediata!
El golpe de calor puede volverse grave rápidamente. Si experimentas alguno de estos síntomas, busca atención médica de inmediato:
- Mareos o desorientación
- Fatiga extrema
- Sudoración excesiva seguida de piel seca
- Fiebre o aumento inusual de la temperatura corporal
- Náuseas o vómitos
Una cultura laboral térmicamente segura
Frente a olas de calor cada vez más frecuentes, las oficinas deben adaptarse. El diseño de los espacios laborales, los horarios, las rutinas y el autocuidado deben ser repensados.
Implementar estas medidas no solo protege la salud, sino que mejora el ambiente laboral, reduce el absentismo y promueve la productividad.
La prevención del golpe de calor en oficinas no es un lujo, es una necesidad.
¿Está preparada tu oficina para enfrentar el calor extremo? Con el cambio climático acelerando, es momento de rediseñar cómo trabajamos. La salud y el rendimiento dependen del ambiente que cultivamos.