En Huixtla, Chiapas, Bernabé Ramírez descubrió que su becerra estaba herida. Al revisar, encontró decenas de gusanos vivos en la piel del animal. El gusano barrenador había llegado.
Una emergencia silenciada: seis municipios en alerta
Desde hace dos meses, seis municipios de la costa chiapaneca reportan infecciones por gusano barrenador. Huixtla, Tapachula, Acacoyagua, Villa Comaltitlán, Mapastepec y Pijijiapan concentran 487 de los 869 casos nacionales, según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
La zona más golpeada
Huixtla encabeza los contagios. Ahí, los ganaderos enfrentan solos la plaga, aplicando tratamientos improvisados sin apoyo constante.
“Revisamos la herida y sacamos como 50 gusanos”, relató Ramírez, quien recurrió a su veterinario de confianza tras detectar la infección.
El miedo a denunciar
Uno de los mayores retos es el temor a reportar los casos. Los productores evitan alertar a las autoridades por miedo a que sus ranchos sean puestos en cuarentena. Esta omisión agrava la propagación.
El ingreso ilegal de ganado: una puerta abierta a la plaga
El director de Fomento Agropecuario de Mapastepec, Nicolás Castañeda, denunció que la plaga habría ingresado desde Centroamérica, debido a la compra de ganado ilegal por parte de algunos productores.
“Tiene que haber mayor vigilancia en la frontera… esta plaga nos llegó del sur”, afirmó Castañeda.
Riesgo en la cadena ganadera nacional
Mapastepec y Pijijiapan son líderes en producción de pie de cría bovino, enviando becerros a estados como Aguascalientes y San Luis Potosí. La presencia del gusano barrenador podría tener un efecto dominó en todo el país.
Una solución olvidada: moscas estériles
Autoridades locales proponen reactivar una antigua técnica de control: la producción de moscas estériles en Chiapas. Esta método, usado exitosamente en el pasado, podría frenar la reproducción del gusano barrenador.
Acciones preventivas, pero sin seguimiento
El SENASICA entregó kits preventivos y realizó inspecciones, pero la participación de los productores sigue siendo escasa. La falta de una estrategia integral podría dejar a Chiapas vulnerable.
Impacto económico: carne más cara y menos producción
Tras el cierre de la frontera norte y la propagación del gusano, el precio de la carne en la región se ha elevado en los últimos 15 días. La infección representa un golpe doble: menos ganado sano y mayor demanda interna.
¿Plaga controlada o bomba de tiempo?
El gusano barrenador no es solo un problema veterinario. Es un desafío social, económico y sanitario. Chiapas enfrenta una amenaza que podría extenderse si no se refuerza la vigilancia y se elimina el miedo a denunciar.