El luto y la rabia desbordaron las calles de Michoacán este viernes. Cerca de 70 mil personas se congregaron en una monumental marcha en Uruapan, exigiendo paz y seguridad tras el asesinato del alcalde Carlos Manzo Rodríguez. El movimiento no solo honró al munícipe, sino que se convirtió en un grito contra la ineficacia gubernamental, con una clara advertencia electoral de cara a 2027.
Uruapan se paraliza: 70 mil voces por la seguridad
La ciudad de Uruapan vivió una jornada de parálisis y protesta masiva este viernes. La movilización, que reunió a cerca de 70 mil personas, tuvo como propósito central exigir justicia por el crimen de Carlos Manzo Rodríguez.
En el marco de esta marcha, el sector empresarial también activó un paro total, lo que provocó que la mayoría de los establecimientos permanecieran cerrados. Este paro incluyó:
- Tiendas.
- Estaciones de servicio.
La convocatoria impactó profundamente la vida económica de la ciudad, sirviendo como una doble señal de luto y de exigencia.
Los manifestantes utilizaron el vestuario como un código visual. La mayoría portó el sombrero que caracterizaba a Carlos Manzo. Algunos acudieron vestidos de blanco, simbolizando la paz anhelada para sus familias, mientras que otros optaron por ropa negra, en señal del luto que vive Uruapan y por las víctimas que diariamente son asesinadas en el país.
El reclamo directo a los gobiernos federal y estatal
La manifestación partió desde la glorieta de la Avenida Latino, avanzando rumbo a la Plaza Morelos, en el centro de Uruapan. A lo largo del recorrido, los ciudadanos, con rabia e indignación, lanzaron consignas directas contra las autoridades del estado y la federación.
Una de las manifestantes resumió el sentir general del pueblo al afirmar: “Hay cansancio por todo lo que está pasando, estamos exigiendo justicia por nuestro presidente que dio tanto por nosotros, que su lucha no sea en vano”.
La desconfianza fue palpable en los gritos:
- “No se confía en el gobierno federal ni estatal ni de nada, ¿qué les pedimos? Si cuando se pidió no estuvieron, no los necesitamos”.
- Consignas como “¡Fuera Bedolla!”, “¡Justicia, justicia!” y “¡Carlos no murió, el gobierno lo mató!” se escucharon entre los asistentes.
El dolor de la familia al frente de la protesta
El contingente, conformado por ciudadanos, empresarios, estudiantes y familiares de desaparecidos, estuvo encabezado por la señora Raquel Ceja, abuela paterna de Carlos Manzo. La mujer, quien se movilizó en silla de ruedas debido a su avanzada edad, compartió el profundo dolor de la pérdida.
Entre lágrimas, la señora Ceja recordó el compromiso de su nieto con la región: “Le decía yo, retírate hijo, no tienes necesidad, no lo hagas y decía en sus palabras, ‘tengo que sacar a Uruapan, quiero, porque es mi tierra, adoro a la gente’, entonces, le quitaron la vida y se acabó para mí la vida”.
Grecia Quiroz: advertencia política y exigencia a la presidenta de México
Al término de la movilización en la Plaza Morelos, arribó Grecia Quiroz, la alcaldesa sustituta y viuda de Manzo Rodríguez, para ofrecer un mensaje contundente a la población.
Quiroz García reveló que su reciente encuentro con la presidenta de México no fue un acto de sumisión, sino una exigencia firme en nombre de los ciudadanos de Uruapan.
La alcaldesa detalló las demandas que llevó ante la titular del ejecutivo federal:
- Exigir justicia para Carlos Manzo.
- Exigir que volteen a ver al municipio de Uruapan.
- Exigir que se saque a todos esos delincuentes que “ellos saben en dónde se encuentran”.
- Exigir que nadie más tenga que vivir bajo la extorsión.
Quiroz enfatizó los sectores económicos afectados, señalando que el comerciante, el tortillero y el sector aguacatero, que es el que “nos sostiene”, no deben ser más extorsionados. “A eso fui con la presidenta de México”, sentenció.
El ‘Movimiento del Sombrero’ y la amenaza de voto de castigo
La sucesora de Carlos Manzo lanzó una advertencia directa a quienes orquestaron el crimen contra el alcalde, una afirmación que sugiere una posible motivación política.
“Quienes mandaron matar a Carlos Manzo no supieron que este sombrero tiene una fuerza imparable, incansable y que en el 2027 les vamos a dar ese voto de castigo”, afirmó Quiroz.
Entre los asistentes, estuvo presente el diputado Carlos Bautista Tafolla, integrante del denominado “Movimiento Independiente del Sombrero”, quien reconoció que, si bien existe el miedo entre quienes integran dicho movimiento, la resistencia es inquebrantable.
El legislador reafirmó el compromiso de la población de Uruapan contra el crimen organizado: “Hay miedo, pero nos lo aguantamos, no podemos irnos de aquí y dejar a Uruapan solo, eso no va a pasar. Ahora ya nos multiplicamos y nos tienen que matar a muchos para que los dejemos entrar, aquí no van a volver a entrar en Uruapan”, dijo en referencia a los delincuentes.
La masiva manifestación, sumada al paro empresarial, subrayó la crisis de seguridad que vive la región y la exigencia de la ciudadanía de no ser abandonada por sus líderes.




