Cada verano, el calor en México deja de ser solo una molestia para convertirse en una sentencia. La mortalidad por olas de calor está en aumento, y sus cifras son tan abrasadoras como el sol que las provoca.
El ascenso letal del calor extremo
Durante las últimas dos décadas, México ha sido testigo de un fenómeno cada vez más letal: las olas de calor están matando a cientos de personas cada año. Aunque las temperaturas extremas no son nuevas, su frecuencia, intensidad y duración se han disparado, empujadas por el cambio climático y un sistema de salud pública que lucha por adaptarse.
De definiciones técnicas a tragedias humanas
Una “ola de calor” puede parecer un término meteorológico, pero para muchos significa la diferencia entre la vida y la muerte. En México, este fenómeno se define de manera dual: una versión técnica para expertos y otra más general para el público. Esta ambigüedad ha generado subregistros y complicaciones para cuantificar realmente cuántas vidas se pierden.
Escalada de muertes: datos que estremecen
El pico de calor: 2023 y 2024
Las cifras son impactantes. En 2023, 421 personas murieron por causas relacionadas con el calor, y en 2024, la cifra preliminar hasta octubre ya era de 329. Estos números son alarmantes, sobre todo al compararlos con los 33 decesos registrados en 2021. La letalidad ha aumentado, evidenciando una crisis sanitaria en ascenso.
Año | Defunciones Totales | Casos Totales | Letalidad (%) |
2021 | 33 | 870 | 3.79% |
2022 | 42 | 1,100 | 3.82% |
2023 | 421 | 4,306 | 9.78% |
2024 | 329 (hasta oct.) | 3,986 | 8.25% |
Estados en alerta roja
Veracruz, Sonora y Baja California encabezan la lista de las entidades con más decesos. Mexicali, con temperaturas que superaron los 50ºC, fue el municipio con más muertes en 2024. Estas zonas representan verdaderos “epicentros térmicos” donde la población enfrenta condiciones extremas sin suficiente apoyo institucional.
Estado | Defunciones 2023 | Defunciones 2024 (hasta oct.) |
Veracruz | Parte de 374 | 79 |
Baja California | Parte de 374 | 47 |
Sonora | Parte de 374 | 47 |
Oaxaca | No listado | 24 |
Tabasco | No listado | 24 |
Quiénes son los más vulnerables
Edad y ocupación: los nuevos factores de riesgo
Aunque los niños y los adultos mayores son tradicionalmente considerados vulnerables, en México las muertes se concentran entre los 45 y 64 años, sobre todo hombres que trabajan al aire libre. Esto revela una relación directa con las condiciones laborales, en especial en sectores como la agricultura, la construcción o el transporte informal.
Desigualdad que mata
El 62% de las personas fallecidas no tenía acceso a servicios de salud. La pobreza, la falta de educación y el trabajo informal se combinan para crear un cóctel mortal. Las personas sin derechohabiencia están expuestas no solo al calor, sino a la imposibilidad de recibir atención médica oportuna.
Golpe de calor: enemigo invisible
Alta letalidad
El golpe de calor tiene una letalidad del 12.5%, mucho más alta que la deshidratación (1.68%). Las personas no siempre reconocen los síntomas a tiempo, y cuando lo hacen, puede ser demasiado tarde. En 2024, esta condición fue responsable del 92.4% de las muertes asociadas al calor.
Condición | Casos 2024 | Defunciones 2024 | Letalidad (%) |
Golpe de calor | 2,431 | 304 | 12.5% |
Deshidratación | 1,488 | 25 | 1.68% |
Quemadura solar | 67 | 0 | 0% |
Evolución clínica
El golpe de calor puede desarrollarse en cuestión de minutos si no se trata el agotamiento por calor. Mareo, confusión, piel seca y caliente, y fiebre elevada son signos de alarma. Actuar rápidamente puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Cambio climático: el catalizador de la crisis
Más calor, menos preparación
La duración de la temporada cálida ha aumentado. Las ciudades son más calurosas por el efecto de isla de calor urbana, y muchas comunidades rurales simplemente no tienen recursos para enfrentar esta amenaza. El cambio climático no solo amplifica el problema: lo acelera.
El riesgo del futuro inmediato
Según la OMS, entre 2030 y 2050 podría haber 250,000 muertes adicionales por año debido al cambio climático. México no está exento. Las muertes por calor pueden triplicarse si no se toman acciones contundentes.
Lo que urge hacer
- Fortalecer los sistemas de alerta temprana.
- Establecer centros de enfriamiento en zonas críticas.
- Regular las condiciones de trabajo al aire libre.
- Asegurar acceso a salud en zonas rurales.
- Invertir en infraestructura urbana resiliente.
- Promover campañas efectivas de concientización.
- Desarrollar un Plan Nacional de Acción contra el Calor.
Cuando el clima se convierte en crisis
La mortalidad por olas de calor no es una estadística fría. Son personas, familias y comunidades enteras que sufren las consecuencias de un país que necesita prepararse mejor para un futuro más caluroso. La pregunta no es si volverá a pasar, sino cuántas vidas se perderán la próxima vez. Lo que está en juego no es solo salud, sino justicia climática y equidad social.