Un monstruo en el horizonte: arranca la temporada de huracanes en México
Otis fue un aviso. El huracán que destrozó Acapulco en 2023 demostró que un sistema tropical puede escalar de simple tormenta a bestia de categoría 5 en pocas horas. En 2025, con condiciones oceánicas similares, el Pacífico vuelve a ser el foco de alerta. La temporada de huracanes ya comenzó, y con ella, la necesidad urgente de estar informados y preparados.
Panorama general: ¿qué esperar de la temporada 2025?
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y CONAGUA prevén entre 16 y 20 ciclones tropicales con nombre en el Pacífico. Al menos 4 a 6 serán huracanes mayores (categoría 3 a 5). Este número es preocupante. A pesar de estar cerca del promedio histórico, la lección es clara: solo se necesita uno para causar una catástrofe. La experiencia reciente demuestra que incluso una temporada “ligeramente activa” puede tener consecuencias devastadoras si un huracán poderoso toca tierra.
Pronóstico para el Pacífico: ciclones con nombre y fuerza
Según el SMN, se espera:
- 8 a 9 tormentas tropicales
- 4 a 5 huracanes de categoría 1 o 2
- 4 a 6 huracanes mayores
Cada uno de estos sistemas representa una amenaza potencial. No solo por su fuerza, sino por su trayectoria y la posibilidad de intensificación súbita. Recordemos que un huracán mayor puede generar vientos superiores a 178 km/h, así como lluvias torrenciales, deslaves y marejadas ciclónicas que impactan vastas regiones costeras.
Lista oficial de nombres 2025 para el Pacífico: Alvin, Barbara, Cosme, Dalila, Erick, Flossie, Gil, Henriette, Ivo, Juliette, Kiko, Lorena, Mario, Narda, Octave, Priscilla, Raymond, Sonia, Tico, Velma, Wallis, Xina, York, Zelda.
Conocer estos nombres facilita el seguimiento de alertas meteorológicas y el acceso rápido a información oficial durante el desarrollo de cada ciclón.
Factores climáticos: lo que alimenta a un huracán
- ENOS en fase neutra: La transición desde La Niña podría favorecer ciclones cerca de la costa mexicana, reduciendo el tiempo de preparación.
- Temperaturas del mar elevadas: combustible directo para sistemas más intensos y rápidos. Se han observado temperaturas superficiales del mar anormalmente cálidas en las regiones de desarrollo ciclónico.
- Cambio climático: eleva la probabilidad de huracanes más violentos. Otis es un ejemplo directo. Este factor estructural incrementa año con año el riesgo de ciclones extremos.
Zonas de mayor riesgo en el Pacífico mexicano
Los estados más expuestos históricamente son:
- Baja California Sur
- Sinaloa
- Jalisco
- Colima
- Michoacán
- Guerrero
- Oaxaca
- Chiapas
Estas regiones no solo presentan alta exposición geográfica, sino también condiciones socioeconómicas que pueden agravar los impactos. La falta de infraestructura resiliente, la pobreza y la informalidad urbana son factores clave de vulnerabilidad.
Meses críticos: agosto y septiembre concentran la mayor actividad
Históricamente, estos dos meses son los más peligrosos. Según datos del SMN, más del 60% de los ciclones impactan durante este periodo. Las comunidades deben redoblar precauciones, realizar simulacros y revisar sus planes familiares.
La amenaza invisible: intensificación rápida
Otis escaló a categoría 5 en solo 12 horas. Esto deja un margen mínimo para actuar. La intensificación rápida es uno de los fenómenos más temidos por meteorólogos y autoridades, ya que dificulta las evacuaciones y las acciones de protección civil. En 2025, se teme que este patrón se repita debido a las temperaturas oceánicas elevadas.
Preparación: claves para actuar antes, durante y después
Antes del huracán:
- Elaborar un plan familiar con rutas de evacuación y comunicación.
- Tener lista una mochila de emergencia con víveres, agua, documentos, medicamentos, linterna y radio.
- Revisar y reforzar la vivienda: limpiar desagües, asegurar techos, ventanas y puertas.
- Revisar pólizas de seguro: especialmente contra inundaciones y daños estructurales.
- Informarse sobre refugios temporales y puntos de reunión seguros.
Durante el huracán:
- No salir de casa o del refugio salvo orden oficial.
- Desconectar gas y electricidad si hay riesgo de inundación.
- No acercarse a ventanas; permanecer en zonas interiores seguras.
- Seguir instrucciones de Protección Civil.
Después del huracán:
- Revisar daños estructurales antes de reingresar al hogar.
- Evitar zonas inundadas o con cables sueltos.
- Mantenerse informado por fuentes oficiales sobre asistencia y recuperación.
El papel crucial de las autoridades y la información confiable
El SMN, CONAGUA y Protección Civil publican boletines constantes. Se recomienda seguir sus canales oficiales en redes sociales y utilizar apps como “Alerta MX”. La desinformación puede ser tan peligrosa como el propio ciclón. No compartas rumores, consulta siempre fuentes verificadas.
Conocimiento y prevención salvan vidas
Con al menos 10 huracanes mayores esperados en todo el país y condiciones propicias para sistemas extremos, la temporada 2025 no debe tomarse a la ligera. La información es poder: usémosla para proteger lo que más importa. Cada acción preventiva suma, y cada minuto ganado puede marcar la diferencia entre la seguridad y la tragedia.