Tras el trágico asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, el foco de la investigación se ha puesto en su círculo de seguridad. Este 3 de noviembre, desde Palacio Nacional, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, ofreció detalles cruciales sobre el asesinato del edil, asegurando que, hasta ahora, no hay indicios de que los escoltas estén implicados.
La defensa de la seguridad del alcalde Manzo
Durante la conferencia matutina del 3 de noviembre, que fue encabezada por la Presidenta Claudia Sheinbaum, el funcionario federal abordó las especulaciones sobre la posible colusión del personal de protección con la delincuencia organizada. García Harfuch indicó que, con base en las investigaciones realizadas al momento, la hipótesis de la complicidad no se sostiene.
El titular de la SSPC fue categórico al señalar que se llevan a cabo las diligencias correspondientes para esclarecer el móvil del crimen que conmocionó a Michoacán.
> “Al momento no se tiene ningún indicio de que el grupo cercano de la policía municipal que cuidaba al alcalde tenga un vínculo con delincuencia organizada, es uno de los propios escoltas el que mata al delincuente, al que priva de la vida al alcalde, son ellos los que reaccionan”, afirmó el titular.
García Harfuch puntualizó que los escoltas actuaron de inmediato, lo que refrenda su papel protector, ya que, como previamente lo había mencionado el “general secretario”, los elementos estaban actuando en el círculo primario y primer círculo de protección del alcalde Manzo.
Colaboración entre autoridades y análisis de evidencia
Harfuch informó que el grupo de escoltas que protegía a Carlos Manzo ya declaró ante la Fiscalía General como parte de las investigaciones. La SSPC está trabajando en conjunto y “de manera muy estrecha” con la Fiscalía del estado de Michoacán.
El funcionario reiteró la conclusión del análisis hasta la fecha:
> “Ellos han declarado en la Fiscalía general, estamos trabajando en conjunto de manera muy estrecha con la Fiscalía del estado de Michoacán, y al momento no hay ningún indicio de que los policías municipales, este grupo de policía municipal que brindaba protección al señor alcalde haya tenido un vínculo”.
Además de los testimonios, se están analizando pruebas videográficas. García Harfuch detalló que se han obtenido y están siendo examinadas imágenes captadas en la zona: “Tenemos imágenes que hemos obtenido de otros negocios, del agresor antes del evento y de otras personas que hemos estado analizando, pero ya tenemos esos videos y estamos trabajando en ello”. También informó que se analizan los videos de las cámaras de videovigilancia aledañas al lugar.
El alcalde Carlos Manzo fue asesinado el sábado pasado en un evento público realizado en una plaza pública de Uruapan.
Reforzamiento de la seguridad en Michoacán
García Harfuch fue enfático en la necesidad de reforzar la estrategia de seguridad en Michoacán, aunque subrayó que el estado ya estaba siendo protegido desde hace tiempo con diversas operaciones.
> “Por supuesto que se va a reforzar, pero sí es importante que sepan que tenemos desde hace unos meses varias operaciones en curso en Michoacán donde lamentablemente, como ya lo comentó el general secretario, hemos perdido la vida de militares en Michoacán, compañeros de la propia secretaría que hemos rescatado por Guardia Nacional al hacer investigaciones en contra de estos grupos”, indicó Harfuch.
El plan inmediato consiste en reforzar las acciones que ya se han venido implementando. El secretario destacó que han tenido detenciones muy relevantes en la entidad y que los operativos continuarán por instrucciones directas de la Presidenta.
Las acciones se enmarcan en una estrategia nacional anti extorsión, de la cual la SSPC ha presentado avances. El titular de la secretaría mencionó que, en enfrentamientos previos, “también han perdido la vida los agresores, los delincuentes”. Finalmente, indicó que el refuerzo de seguridad en Michoacán priorizará la investigación sobre el uso de la fuerza, buscando “ubicar a los delincuentes para ir y hacer detenciones de manera con operativos muy claros como lo hemos venido haciendo”.
La contundencia de Omar García Harfuch al descartar el vínculo de los escoltas de Carlos Manzo busca acotar el ruido político que rodea el crimen. Sin embargo, la ola de violencia que culminó con el asesinato de un edil en un espacio público subraya la fragilidad del control territorial en Uruapan. La promesa de reforzar la estrategia nacional anti extorsión es clave, pero ¿será suficiente la priorización de la investigación para desmantelar las estructuras criminales en una entidad que ha sufrido la pérdida de personal militar y de seguridad en meses recientes?




