Hugo Aguilar Ortiz, ministro presidente electo de La Suprema Corte de Justicia de la Nación, ha delineado su visión para el futuro del Poder Judicial. En un firme pronunciamiento, aseguró que su gestión se caracterizará por una independencia inquebrantable, manteniendo un diálogo constructivo con los poderes del Estado Mexicano y la sociedad, pero sin ceder a presiones externas.
Un compromiso con la independencia judicial
Hugo Aguilar Ortiz, ministro presidente electo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ha enfatizado su postura firme respecto a la autonomía del Poder Judicial. Tras participar en el encuentro “México Pluricultural: Avances y retos en los Derechos de los Pueblos Indígenas” en la Cámara de Diputados, y en una conferencia de prensa posterior, fue cuestionado por El Heraldo de México.
Aguilar Ortiz afirmó que, si bien habrá puertas abiertas para el diálogo con todos los sectores, no permitirá presiones de ningún tipo para la toma de decisiones y que no aceptarán injerencia alguna de ningún sector. “Y vamos a estar abiertos a dialogar con todos, pero cuando vayamos a tomar la decisión, la haremos con base en la Constitución, en las leyes y en el criterio que nosotros tengamos, sin presión de ningún tipo, sin la injerencia de nadie en esta parte que la Constitución nos mandata en lo que corresponde a nuestras atribuciones, las vamos a ejercer con independencia”, indicó.
Una nueva era: Sin afinidades políticas
Acompañado por el presidente de la Junta de Coordinación Política en San Lázaro, Ricardo Monreal, y el entonces presidente de la Mesa Directiva, Sergio Gutiérrez Luna, el próximo titular del alto tribunal constitucional subrayó su independencia política. Explicó que no tiene afinidad partidista ni compromisos con grupos de interés, dado que su llegada es resultado de la Reforma al Poder Judicial.
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“Yo lo que les digo es que no tengo carrera política, no tengo compromiso con ningún partido político, agrupación política, ni con ningunos otros sectores que tengan intereses en La Corte, al seno de la Corte; yo llego, como ha señalado el presidente de la Junta de Coordinación Política, por la reforma Judicial”, precisó.
Transformación en la operación y cercanía ciudadana
Desde el Salón Legisladores de la Cámara baja, Aguilar Ortiz aseguró que los cambios en la aplicación de la justicia serán visibles desde el primer día de su gestión. Su objetivo es dejar atrás la imagen de los ministros inalcanzables y transformar el proceso de impartición de justicia en México.
“Desde el día uno, vamos a aprobar los acuerdos generales necesarios para el nuevo funcionamiento de la Corte, vamos a cambiar aspectos de forma; desde abrir la puerta, desde el trato, la cercanía de la gente, ya no va a haber el ministro inalcanzable, el ministro que es difícil dialogar con él, la única limitante va a ser el tiempo, lo que nos alcance las horas del día para dialogar con todos, para atender a todos y para resolver los asuntos de nuestra competencia, se va a ver desde el primer día”, explicó.
Austeridad y eficiencia en la gestión
En cuanto a los temas presupuestales, el ministro electo informó que ya analizan modificaciones para optimizar el funcionamiento de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Aseguró que los ajustes se realizarán bajo el principio de “hacer mucho con poco”, garantizando eficiencia sin sacrificar la austeridad.
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“Tengan la confianza que no va a haber una contradicción entre austeridad y eficiencia, vamos a poder hacer mucho con poco, ese es el principio básico con el que vamos a regir nuestra actuación”, afirmó. Previamente, Hugo Aguilar fue recibido por Gutiérrez Luna y se reunió en privado con el coordinador de Morena, para luego realizar un recorrido por el Palacio Legislativo de San Lázaro.
Con estas declaraciones, Hugo Aguilar Ortiz establece un claro precedente para su gestión al frente del máximo tribunal, proyectando una visión de independencia judicial, transparencia y cercanía con la ciudadanía. ¿Será esta la nueva era de justicia que México anhela?