La historia del transporte en Yucatán está cambiando. Lo que antes era un sistema rezagado, ahora enfrenta una transformación impulsada por justicia social y planeación técnica.
Un nuevo comienzo para el transporte en Yucatán
Con una visión clara de justicia social, el Gobierno de Yucatán y la Agencia de Transporte (ATY) han iniciado un proceso profundo de reordenamiento del sistema público de movilidad. A través de mesas técnicas y un nuevo Estudio de Origen y Destino, se busca reparar fallas heredadas por administraciones anteriores.
“El modelo de modernización es el correcto, pero nos toca resolver su implementación para garantizar un transporte eficiente, seguro y sustentable“, declaró Jacinto Sosa Novelo, titular de la ATY.
El papel de los concesionarios: aliados del cambio
A diferencia del pasado, los concesionarios hoy no solo participan, sino que también financian el cambio. Empresas como MOBILITY ADO, Grupo Canto y Circuito Metropolitano han manifestado su respaldo total al nuevo esquema, participando en el financiamiento del estudio y las mesas de trabajo.
- 16 empresas concesionarias se reunirán en mesas técnicas permanentes
- El nuevo estudio sustituye al obsoleto informe de 2014
- El “Va y Ven” seguirá operando sin aumento en tarifas
Este modelo de colaboración público-privada es, según los actores, una muestra de voluntad y responsabilidad compartida.
Diagnóstico y planeación para un sistema justo
El nuevo Estudio de Origen y Destino permitirá identificar la demanda real de movilidad en el estado, corrigiendo rutas ineficientes y acercando el servicio a colonias marginadas.
“Vamos a mejorarlo con responsabilidad y de la mano de quienes operan el sistema“, aseguró Sosa Novelo, quien también subrayó que este esfuerzo es un acto de justicia para los usuarios.
La participación activa del gobierno encabezado por Joaquín Díaz Mena, representado por Dafne López Martínez, reafirma que la movilidad en Yucatán es ahora una prioridad estatal.
Un modelo que corrige el pasado y mira al futuro
El contexto heredado es claro: falta de planeación, rezagos operativos y rutas ineficientes. La nueva estrategia, sin embargo, plantea una visión sostenible, equitativa y orientada a la ciudadanía.
Este tipo de acciones están alineadas con los principios de justicia social, planeación técnica y participación ciudadana, elementos claves para que el sistema de transporte evolucione al ritmo de las necesidades reales de Yucatán.
El reordenamiento del transporte en Yucatán no es solo una actualización técnica: es una declaración de intenciones. Un pacto entre gobierno y concesionarios por un mejor futuro. ¿Podrá este modelo sentar precedente para otras regiones del país?