Un inesperado desembarco de inmigrantes marroquíes sorprendió a los bañistas en la playa del Sotillo, Castell de Ferro, Granada, el pasado domingo 3 de agosto de 2025. El suceso, grabado y viralizado en redes sociales, mostró a algunos veraneantes persiguiendo a los recién llegados, mientras las autoridades iniciaban un operativo de búsqueda y detención.
El arribo en la playa del Sotillo
Alrededor de las 14:00 horas, una lancha semirrígida de color negro, de unos 15 metros de eslora y equipada con dos potentes motores, apareció a gran velocidad frente a la costa granadina. Según testigos citados por los diarios Ideal y Granada Hoy, la embarcación rebasó la línea de boyas de seguridad y se aproximó a pocos metros de la orilla, frente a un concurrido puesto de bebidas. Este suceso ocurrió en el punto más álgido del verano, provocando sorpresa entre los numerosos bañistas.
La inesperada llegada de los inmigrantes
De forma repentina, un grupo de personas saltó al agua y nadó hacia la playa, dispersándose rápidamente entre la multitud. Algunos corrieron hacia el casco urbano, mientras que otros intentaron esconderse entre los bañistas. La lancha viró bruscamente tras el desembarco y se alejó mar adentro, con al menos tres personas aún a bordo, ocultando sus rostros.
La reacción de los bañistas
Las imágenes del incidente, que se viralizaron, mostraron a algunos bañistas emprendiendo una persecución contra los extranjeros con el fin de que fueran detenidos por las autoridades. Aunque algunos bañistas intentaron ayudar a los inmigrantes a llegar a la orilla, otros colaboraron en la interceptación de varios de ellos antes de la llegada de las autoridades. Entre las grabaciones, se observa la de un hombre con traje de baño de color naranja que sometió a uno de los inmigrantes recién desembarcados, colocándose sobre él para evitar su movimiento.
Intervención de las autoridades y detenciones
La alcaldesa de Castell de Ferro, Antonia María Antequera, confirmó los hechos ocurridos en la playa del Sotillo. La Policía Local, en coordinación con la Guardia Civil, desplegó un operativo para localizar e identificar a los implicados.
Las autoridades detuvieron a nueve de los inmigrantes en las horas posteriores. Algunos fueron interceptados por los propios bañistas y otros localizados tras persecuciones por calles, campings y propiedades privadas cercanas. Según las primeras declaraciones de los detenidos, una décima persona viajaba en la embarcación, pero permanece sin localizar. Las autoridades mantienen activa su búsqueda.
Atención y trámites en el CATE
El subdelegado del Gobierno en Granada, José Antonio Montilla, informó a Europa Press que los nueve detenidos fueron trasladados al Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) del Puerto de Motril. Allí recibieron atención médica de la Cruz Roja, que confirmó su buen estado de salud. Además, se les proporcionó ropa seca, alimentos y agua mientras se tramitan las órdenes de expulsión. Montilla destacó que este es el segundo desembarco registrado en la costa granadina en 2025, y el primero en utilizar el recién inaugurado CATE de Motril.
Este incidente subraya la compleja realidad migratoria que enfrenta la costa española y la diversidad de reacciones que puede generar entre la población local, desde la ayuda humanitaria hasta la colaboración en la interceptación de los recién llegados.