El Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Sur del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha dado un paso decisivo hacia la normalización. Tras la suspensión de clases provocada por el trágico suceso donde un estudiante mató a otro, la institución busca demostrar que existen condiciones que permiten el reingreso a la totalidad de las actividades presenciales, reforzando la seguridad en CCH Sur.
Retorno gradual y verificación comunitaria en el CCH Sur
La máxima casa de estudios implementó recorridos de observación en el plantel Sur del Colegio de Ciencias y Humanidades. Esta convocatoria, que se mantiene activa hasta el miércoles, tiene como objetivo que la propia comunidad estudiantil pueda constatar el cumplimiento de las exigencias de protección que surgieron a raíz del lamentable hecho de violencia que derivó en la suspensión de clases.
Según las autoridades, la suspensión de actividades y las subsecuentes demandas de seguridad de la comunidad estudiantil impulsaron una estrategia integral. Señalaron que este proceso integra infraestructura, vigilancia, organización comunitaria y atención emocional para garantizar un entorno seguro y confiable para los estudiantes.
La nueva infraestructura de protección física
Durante las visitas guiadas, las y los alumnos están verificando la instalación de una serie de elementos de seguridad que buscan disuadir incidentes y aumentar la capacidad de respuesta interna. Esta infraestructura incluye:
- Control de acceso: Instalación de 15 torniquetes y detectores de metal.
- Vigilancia constante: Implementación de 70 cámaras de videovigilancia.
- Respuesta inmediata: Colocación de 50 botones de emergencia distribuidos estratégicamente.
- Refuerzo perimetral: Adición de 120 metros de reja y barandal.
- Mejora de visibilidad: Colocación de 271 luminarias en zonas de baja visibilidad.
Las autoridades han señalado que este proceso no solo se limita a la infraestructura física, sino que integra la vigilancia y la organización comunitaria para asegurar un entorno confiable.
Atención psicológica: el factor emocional para la convivencia
Además de las medidas materiales, la UNAM ha puesto en marcha un sistema de apoyo emocional y académico. En la explanada principal del plantel operan siete Quioscos Universitarios que ofrecen una batería de servicios esenciales para la recuperación y el bienestar de los estudiantes.
Los Quioscos Universitarios se centran en:
- Ofrecer información sobre atención psicológica especializada.
- Intervención en crisis.
- Acompañamiento académico.
- Programas orientados al bienestar emocional y la convivencia saludable.
Este enfoque integral, que combina seguridad física y atención emocional, busca garantizar un entorno seguro y confiable para la comunidad estudiantil. Es importante destacar que, en los grupos que realizan los recorridos, no hay clases.
La decisión final, en manos de la comunidad
El proceso de verificación culminará con la evaluación de los estudiantes. Al concluir los recorridos de observación, se evaluará en comunidad la pertinencia del retorno total a las aulas. Esto subraya el compromiso de las autoridades de integrar la opinión estudiantil en la fase final de la crisis, luego del cumplimiento de las demandas de seguridad planteadas por la comunidad.
El esfuerzo por recuperar la normalidad en el Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Sur demuestra que la seguridad en las instituciones académicas exige una respuesta multidimensional, donde la infraestructura debe ir necesariamente de la mano con la atención a la salud mental. ¿Serán suficientes estos mecanismos, sumados a la validación comunitaria, para restaurar la confianza y garantizar que hechos tan trágicos no se repitan?




