La frontera se ha convertido en una puerta giratoria de evasión fiscal. Claudia Sheinbaum quiere cerrarla con una nueva ley de aduanas, enfocada en la transparencia y responsabilidad en toda la cadena de importación.
Una reforma fiscal con foco fronterizo
El problema: evasión a través de maquilas
Durante su conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum fue clara: hay productos que entran a México sin pagar IVA ni IEPS bajo el pretexto de ser mercancías de exportación, pero en realidad se quedan en el país.
“Muchas veces se trampea, vamos a decirlo así (…) se dice que se van a exportar, y entonces ahí se deja de pagar un montón de IVA e IEPS”, explicó la mandataria.
Este tipo de maniobras —frecuentes en sectores como la maquila electrónica, textil o automotriz— erosionan la recaudación tributaria y distorsionan la competencia interna.
La solución: nueva ley de aduanas
Para enfrentar esta situación, el gobierno federal alista una reforma legal específica sobre aduanas. Aunque aún no se ha presentado el texto definitivo, Sheinbaum adelantó que el objetivo será claro:
- Responsabilizar a todos los actores de la cadena de importación.
- Eliminar lagunas legales que permiten el disfraz de exportación.
- Fortalecer los procesos de revisión y fiscalización en frontera.
El tamaño del problema: miles de millones en juego
Cifras contundentes
La mandataria contextualizó la gravedad del fenómeno con datos que sorprenden:
- Las aduanas mexicanas recaudan 1.25 billones de pesos anuales.
- Solo en lo que va del año, su gobierno aumentó en 83 mil millones la recaudación aduanera.
- En el sexenio anterior, la recaudación creció en 250 mil millones.
Estos números dejan claro que hay margen para mejorar aún más, si se logra frenar la evasión sistemática.
“Todavía había mucho (…) y eso que el presidente López Obrador aumentó la recaudación (…) nosotros (…) hemos aumentado 83 mil millones adicionales”, afirmó.
¿Cómo se evade el IVA e IEPS?
Los productos que ingresan con exención fiscal por supuesta exportación evitan dos impuestos clave:
- IVA (Impuesto al Valor Agregado): Grava el consumo en territorio nacional.
- IEPS (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios): Aplica a bienes como alcohol, tabaco, gasolina y alimentos con alta densidad calórica.
La maniobra consiste en declarar la mercancía como temporal o para ensamblaje de exportación, aunque en realidad se comercializa en el mercado nacional. Esto no solo representa evasión fiscal, sino también competencia desleal para productores que sí pagan impuestos.
El contexto político y económico
Continuidad con transformación
Durante su campaña, Sheinbaum ya había señalado la necesidad de “ordenar las aduanas”. Esta reforma se alinea con su promesa de continuar y profundizar la llamada Cuarta Transformación.
“Yo decía en campaña que todavía había mucho”, recordó, aludiendo al margen de mejora en fiscalización.
Aduanas: nodo estratégico
En el marco del comercio internacional, las aduanas no solo recaudan. Son también clave para:
- Prevenir el ingreso de mercancía ilegal.
- Controlar el flujo de productos regulados.
- Proteger la industria nacional.
Por eso, expertos señalan que una reforma aduanera bien estructurada puede tener un impacto económico directo, pero también implicaciones en seguridad, legalidad y soberanía comercial.
Claves de la posible ley aduanera
Aunque aún no se conocen los artículos concretos de la reforma, con base en lo dicho por la presidenta y prácticas internacionales, es posible anticipar algunos ejes:
1. Fiscalización más rigurosa
- Verificación física y documental de mercancías que se declaran para exportación.
- Revisión de inventarios de maquilas con cruce de datos en tiempo real.
2. Transparencia en la cadena logística
- Registro digital de cada eslabón de importación.
- Trazabilidad con códigos QR o blockchain.
3. Penalización efectiva
- Multas proporcionales al monto evadido.
- Cierre temporal o permanente de operaciones reincidentes.
4. Coordinación institucional
- Mayor cooperación entre SAT, Guardia Nacional y Secretaría de Economía.
- Uso intensivo de inteligencia fiscal y análisis de riesgo.
¿Quiénes podrían verse afectados?
Empresas maquiladoras
Particularmente aquellas que utilizan el modelo IMMEX (Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación). Si bien muchas operan legalmente, las reformas apuntarán a quienes abusan del régimen.
Importadores intermediarios
Empresas que simulan exportaciones o triangulan mercancías para evitar el pago de impuestos tendrán que cambiar sus prácticas o enfrentar sanciones.
Consumidores e industria nacional
A mediano plazo, la medida podría tener efectos positivos en precios justos, al eliminar distorsiones causadas por evasión. Además, se fortalecería la industria mexicana que sí cumple con la carga fiscal.
¿Una reforma fácil de implementar?
Desafíos operativos
- Corrupción en puntos aduanales.
- Falta de personal capacitado.
- Resistencia de grupos empresariales que se benefician del vacío legal.
Ventajas a favor del gobierno
- Datos fiscales más precisos gracias al uso de tecnología.
- Creciente apoyo social a la lucha contra privilegios fiscales.
- Experiencia acumulada durante el gobierno anterior.
¿Fin de una era de simulación fiscal?
La reforma aduanera propuesta por Claudia Sheinbaum no es solo una cuestión de ingresos públicos. Es una apuesta por cerrar uno de los agujeros negros del sistema tributario mexicano, donde durante años ha reinado la simulación.
Si la ley prospera, podría marcar el inicio de un nuevo modelo de comercio más transparente y equitativo. Si fracasa, en cambio, se consolidaría la percepción de que en la frontera mexicana se juega con reglas propias.
¿Estamos ante el fin de la evasión tolerada o simplemente ante una nueva narrativa? El tiempo y la letra fina de la ley lo dirán.